Política

Alcalde Joaquín Ramírez se victimiza tras allanamiento de su casa: “Hay una cacería política”

El burgomaestre de Cajamarca despotricó contra el fiscal que ordenó el allanamiento y aseguró no estar "preocupado".

Joaquín Ramírez rechazó las acusaciones en su contra por presunto lavado de activos. Foto: difusión
Joaquín Ramírez rechazó las acusaciones en su contra por presunto lavado de activos. Foto: difusión

El alcalde de Cajamarca, Joaquín Ramírez, se victimizó y aseguró que el allanamiento en su vivienda, realizado el último 25 de febrero, es parte de una cacería política en su contra. Asimismo, despotricó contra el juez que ordenó la medida y lo acusó de presentar irregularidades en su trayectoria profesional.

"He hablado con mi abogado y me comunica que es una resolución de un conocido juez Zúñiga que tiene bastantes quejas, el Tribunal Constitucional le ha corregido varias resoluciones. El juez Zúñiga no es de garantía para nadie, así que seguramente en un par de semanas todo esto se revertirá", comentó a la prensa.

Asimismo, agregó: "De hecho que hay una cacería política".

Joaquín Ramírez: ¿por qué la Fiscalía allanó su vivienda?

El allanamiento a su vivienda se realizó en el marco de la investigación en su contra por presuntamente formar parte de una organización criminal dedicada al fraude y lavado de activos. De acuerdo con la tesis fiscal, su fallecido tío y rector de la Universidad Alas Peruanas (UAP), Fidel Ramírez Prado, habría desviado millonarias sumas de dinero hacia empresas pantallas que tenían como titulares a sus familiares. Asimismo, a Ramírez se le imputa haber destinado montos ilícitos para la campaña política de Fuerza Popular.

Asimismo, la Fiscalía sostiene que Maribel y Nancy Ramírez, hijas de Fidel Ramírez Prado, simularon trabajar en la UAP, montaron empresas que contrataron con la misma universidad y compraron bienes a precios sobrevalorados. El agente encubierto de la Administración de Control de Drogas (DEA), Jesús Vásquez, quien fue el encargado de infiltrarse entre los Ramírez, indicó al fiscal del caso Wilson Salazar, que encontró cuatro mansiones de las hijas del exrector de la Universidad Alas Peruanas por casi US$8 millones.

El exagente de la DEA tenía la misión de ganarse la confianza de los Ramírez debido a que sospechaban que lavaban dinero a través de la compra de inmuebles y aeronaves. Tras cumplir con su labor como agente encubierto, indicó que fue Joaquín Ramírez quien le contó que habría lavado US$ 15 millones para Keiko Fujimori.

“La DEA me dio la misión de ‘lavar’ US$20 millones. Me dijeron: ‘Lo único que queremos es que tú presentes al empresario (el agente encubierto) al brazo derecho de Fidel Ramírez Prado, de nombre Edgardo Sánchez Castro’. Era quien venía a Miami a ver las propiedades de Fidel Ramírez", manifestó.