Gobierno de Trump ordena salir "inmediatamente" de EEUU a casi 1 millón de inmigrantes que ingresaron usando CBP One
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) revocó los permisos migratorios otorgados y ordena a los inmigrantes que abandonen el país por su cuenta, de lo contrario, enfrentarían consecuencias más severas.
- ¿Cómo los inmigrantes latinos pueden estar listos ante una posible recesión económica en EEUU? Expertos responden
- Sheinbaum rechaza cualquier intervención militar de EE. UU. contra los cárteles en México: Trump estudia atacarlos con drones

La situación de los migrantes en Estados Unidos ha dado un giro inesperado, ya que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha ordenado a casi un millón de inmigrantes que se autoexilien, revocando los permisos previamente otorgados para su permanencia en el país. Esta decisión afecta a personas que ingresaron al país utilizando la aplicación CBP One, una herramienta que, hasta ahora, les permitió presentar solicitudes de asilo de manera ordenada y remota. El mensaje es claro: deben regresar a sus países de origen por su propia cuenta, o enfrentar la posibilidad de ser deportados y excluidos permanentemente de Estados Unidos.
A pesar de que la aplicación fue diseñada para regular la entrada de migrantes en el país, la reciente medida pone en duda la efectividad de las políticas migratorias que se han implementado en los últimos años. Si bien el gobierno de Biden tomó el control de las políticas de inmigración, la influencia de la administración de Donald Trump sigue marcando el rumbo de las decisiones que impactan a quienes buscan asilo en el país. Las nuevas reglas de autodeportación no solo afectan a quienes se beneficiaron de CBP One, sino que también muestran las dificultades que enfrentan miles de migrantes en su intento de regularizar su situación en Estados Unidos.

PUEDES VER: Real ID en California: el DMV guía y apoya a los inmigrantes a obtener este documento clave
DHS revoca permisos y da la orden de autoexilio
La decisión del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de revocar los permisos de los migrantes que usaron la aplicación CBP One tiene implicaciones profundas para la comunidad migrante. La app fue creada como una vía para facilitar la entrada legal de solicitantes de asilo, permitiendo que estos presentaran su caso antes de llegar a la frontera sur de Estados Unidos. Sin embargo, la medida reciente ha dejado claro que, si bien la aplicación parecía una solución práctica, las políticas migratorias del país no han garantizado la permanencia de quienes utilizaron la herramienta. Ahora, a casi un millón de migrantes se les ha pedido que abandonen el país de forma voluntaria, bajo amenaza de ser deportados si no cumplen con la orden.
Esta orden de autoexilio se dirige a los migrantes que llegaron bajo la administración de Biden para que el proceso de entrada al país sea ordenada. Sin embargo, el Departamento de Seguridad Nacional dejó en claro que quienes no cumplan con las nuevas directrices enfrentarán consecuencias severas. En el contexto actual, los migrantes que recibieron permisos mediante CBP One se encuentran ahora en una situación incierta, sin opciones claras para regularizar su estatus.

PUEDES VER: Ciudadanía americana: los desafíos que enfrentan los inmigrantes para naturalizarse en EEUU
La respuesta de los migrantes y los defensores de derechos humanos
Defensores de los derechos de los inmigrantes han señalado que los migrantes afectados por las recientes notificaciones incluyen a ciudadanos de México, Honduras y El Salvador. Además, el aviso emitido por las autoridades informa que los beneficios previamente otorgados, tales como los permisos de entrada y las autorizaciones de trabajo, han sido revocados. La notificación advierte que los migrantes que no cumplan con la orden podrían enfrentarse a un proceso penal, multas civiles y otras sanciones, así como a cualquier medida legal adicional que el gobierno federal considere apropiada.
En un correo electrónico obtenido por la BBC, se informó a un migrante: "Es hora de que salgas de Estados Unidos". El mensaje también advirtió que, si el migrante no abandona el país de inmediato, podría enfrentarse a medidas policiales que podrían derivar en su expulsión, a menos que pueda demostrar una base legal para permanecer en el territorio estadounidense. Además, también se les comunica que los beneficios otorgados como parte de su permiso de entrada a Estados Unidos, incluyendo la autorización para trabajar, han sido anulados. En caso de no cumplir con la orden, podrían enfrentar un proceso penal, multas civiles, sanciones y cualquier otra medida legal que el gobierno federal considere pertinente.
La reacción de los migrantes afectados por la revocación de permisos y la solicitud de autodeportación ha sido de confusión y desesperación. Muchos se sienten atrapados entre la necesidad de regresar a sus países, donde podrían enfrentar situaciones de riesgo, y la imposibilidad de regularizar su situación.