Política

Patricia Muriano, exasistenta de Dina Boluarte y testigo clave en caso cirugía, ganó más de S/130.000 en Despacho Presidencial

La República accedió a las órdenes de servicio de la exasistenta de Dina Boluarte, emitidas desde noviembre de 2021, durante el gobierno de Pedro Castillo, hasta julio de 2023.

Dina Boluarte habría mentido respecto a su intervención quirúrgica. Foto: composiciónLR/difusión
Dina Boluarte habría mentido respecto a su intervención quirúrgica. Foto: composiciónLR/difusión

Patricia Muriano, exasistenta de Dina Boluarte, testigo clave en el caso de las cirugías estéticas y protagonista del último audio, donde revela que la mandataria habría falsificado la historia clínica de su operación a la nariz, ganó S/137.000 en órdenes de servicio para el Despacho Presidencial.

De acuerdo con información a la que accedió La República, quien fuera una de las personas más cercanas al entorno de la presidenta empezó a trabajar en Palacio de Gobierno desde el gobierno de Pedro Castillo.

Según estos documentos, Muriano obtuvo este puesto en siete ocasiones: en noviembre de 2021, por un monto de S/10.000; en mayo de 2022, por S/19.500; en agosto de 2022, por S/13.000; en octubre de 2022, por S/19.500; en enero de 2023, por S/22.500; en abril de 2023, por S/30.000, y, por último, en julio de 2023, por S/22.500, mes en que Boluarte se sometió a una operación nasal.

Los servicios dados por la exasistenta de la presidenta responden a servicios de apoyo en asistencia técnica administrativa para la secretaría general y para la oficina de la vicepresidencia.

Patricia Muriano: ¿quién es la asistenta de Dina Boluarte?

La historia de Muriano y Boluarte se remonta a cuando ambas trabajaban en la sede de Surco de Reniec. María Patricia Muriano Peralta, de 37 años, fue una figura clave en la vida política de Dina Boluarte. Desde su primer encuentro en Reniec, en 2015, donde Boluarte era su jefa, la amistad entre ambas se consolidó rápidamente. Muriano no solo fue secretaria personal de la presidenta, sino que también asumió roles importantes dentro del partido Perú Libre, donde se destacó como tesorera, de acuerdo con un informe de Perú 21.

A pesar de su estrecha amistad, la relación entre Muriano y Boluarte se deterioró debido a la desconfianza. Rumores sobre grabaciones clandestinas y la supuesta filtración de información a la prensa llevaron a Boluarte a pedir la renuncia de Muriano. Esta situación culminó en la salida de la exsecretaria de Palacio, llevándose consigo información valiosa que podría ser utilizada en su contra.

La ruptura no solo fue personal, sino que también dejó a Muriano en una posición estratégica, con la posibilidad de testificar sobre los eventos que rodean a la presidenta. Sin embargo, su testimonio aún no ha sido escuchado por la Fiscalía, lo que plantea interrogantes sobre la dirección de la investigación.