La sorprendente razón por la cual los peruanos tardan más en independizarse que el resto de Sudamérica según un estudio
Un estudio revela que la edad promedio a la que los jóvenes en Perú abandonan el hogar familiar es la más alta de Sudamérica, lo que refleja un fenómeno social complejo influenciado por factores económicos y culturales.
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La búsqueda de independencia por parte de los jóvenes peruanos enfrenta múltiples obstáculos. La falta de empleos bien remunerados y el alto costo de vida son solo algunas de las dificultades que complican el proceso de establecerse por cuenta propia. Además, la cultura familiar y la tradición de vivir con los padres hasta el matrimonio juegan un papel crucial en la tardanza de esta transición hacia la autonomía.
Según un estudio de la plataforma DadaRoom, ahora conocida como Roomi, los jóvenes peruanos optan por independizarse a una edad promedio de 29 años, lo que contrasta notablemente con otros países de América Latina. Este fenómeno no solo refleja una realidad económica, sino también una serie de implicaciones sociales que afectan la vida de los jóvenes en el país.

La edad promedio de los peruanos en independizarse es de 29 años. Foto: El Confidencial
Comparativa internacional: ¿cómo se compara Perú con otros países?
La situación de los jóvenes peruanos es notablemente diferente a la de sus pares en otros países. En Estados Unidos, la mayoría de las personas se independiza alrededor de los 24 años, mientras que en Suecia y Francia, este paso se da a los 20 y 23 años, respectivamente. En Brasil, la edad promedio es de 25 años, y en Colombia y Chile, los jóvenes suelen dejar el hogar familiar a los 27 años. Esta diferencia en la edad de independencia resalta la complejidad del contexto peruano.
¿Qué factores influyen en la tardanza de la independencia?
El retraso en la independencia de los jóvenes peruanos puede atribuirse a varios factores. Las limitadas oportunidades laborales y el acceso restringido a la educación superior son elementos que contribuyen a esta situación. Además, las presiones culturales para mantener lazos familiares sólidos dificultan aún más la decisión de abandonar el hogar.
De acuerdo con los datos de Roomi, el salario mínimo y el nivel de asistencia gubernamental son determinantes en la tardanza de la independización. A diferencia de países como Francia, donde el gobierno ofrece asistencia financiera para el alquiler de viviendas y descuentos en el transporte público para jóvenes menores de 27 años, en Perú las políticas de apoyo son limitadas, lo que complica aún más la situación.
Reflexiones sobre la independencia juvenil en Perú
La independización es un proceso que implica adquirir autonomía y libertad para tomar decisiones. Sin embargo, en el contexto peruano, este proceso se ve obstaculizado por una serie de factores económicos y culturales que retrasan la transición a la vida adulta. La situación actual plantea la necesidad de reflexionar sobre las políticas de apoyo a los jóvenes, con el fin de facilitar su independencia y mejorar su calidad de vida.
¿Cuál es la mejor edad para independizarse?
Estudios psicológicos determinaron que la mejor edad para irse a vivir solo es entre los 20 y los 25 años. Se trata de un período de transición de la adolescencia a la adultez en el que las personas comienzan a desarrollar su madurez y autonomía.
¿Cuánto cuesta independizarse en Perú?
Al independizarse, una persona en Lima gasta aproximadamente US$922 al mes en alquiler y servicios básicos como electricidad, agua e internet. A esto se le suman otros gastos esenciales como alimentación, transporte y entretenimiento, lo que eleva el presupuesto mensual a cerca de US$1.200 o más, dependiendo del estilo de vida y la zona elegida para vivir.
¿Cómo entrenarse para ser independiente?
Adquirir habilidades esenciales para la vida, definir metas claras y diseñar planes de acción, aprender a administrar el tiempo de manera efectiva, construir una red de apoyo sólida, priorizar el autocuidado y asumir los errores y fracasos como parte del aprendizaje son aspectos clave para el crecimiento personal. Con constancia y determinación, cualquier persona tiene la capacidad de convertirse en un adulto independiente y construir la vida que sueña.
¿Qué hay detrás de una persona independiente?
Las personas que siempre rechazan cualquier tipo de ayuda que se les pueda ofrecer, que hacen sus caminos de vida libres y, generalmente, evitando responsabilidades y compromisos relacionales, que prefieren la soledad a cualquier tipo de compañía, presentan este rasgo tan característico.