Donald Trump el presidente de los Estados Unidos, esta conmocionando al mundo con su política arancelaria de carácter mundial. Una política arancelaria significa en lo esencial que se le pone impuestos a todo el mundo. El mensaje es: quieres entrar a mi mercado entonces paga impuesto del 10 al 80 por ciento de acuerdo al grado de tu sometimiento a mi voluntad.
Trump parece decirse: si pongo impuesto a todas las importaciones, finalmente los desánimo y muy pronto se equilibrarán las importaciones con las exportaciones de los Estados Unidos.
Hace mas de 20 años Atish Ghosh y Uma RamaKrishnan en la revista Finanzas y Desarrollo del Fondo Monetario Internacional sostuvieron que “cuando un país acumula grandes déficits, empresarios, sindicalistas y parlamentarios no tardan en señalar a los socios comerciales y acusarlos de prácticas desleales”. Se cae así en una conclusión rápida y atrevida: exportar es bueno e importar es malo, se olvida, que para exportar hay que importar. Se olvida también que el que las importaciones sean mayores que las exportaciones pueden obedecer a que las inversiones sean mayores que el ahorro.
El que un déficit sea bueno o malo depende siempre de los factores que lo originaron, puede por ejemplo ser indicio de problemas de competitividad. Y la competitividad es un asunto muy complejo, tiene que ver con la educación, con la innovación, con la ciencia, con la política económica, con la productividad, con las instituciones, el salario y las ganancias. La competitividad es el desarrollo mismo.
¿Trump es entonces accidente o consecuencia de un cableado mas complejo, que tarde o temprano se expresaría con otro nombre? ¿El problema es de política económica y comercial o es de geopolítica y economía política? Es de economía política.
Los sistemas económicos se expanden y contraen y las contracciones cuando son más severas, nos acercan a una crisis económica. Y las crisis se resuelven, parafraseando a John Kennedy: No hundiendo al mundo para que Trump y los Estados Unidos se salven sino salvando al mundo para que incluso los Estados Unidos se salven.