Sociedad

Agroquímicos en piñas del Perú podrían causar cáncer y alzhéimer: "Lavarlas no garantiza eliminar pesticidas"

Según el exministro Hernando Cevallos, el Estado no tendría un control riguroso sobre la cantidad y tipo de pesticidas usados en la agricultura. Expertos alertan sobre la urgencia de adoptar medidas para reducir su uso y prevenir riesgos para la salud.

Especialistas piden medidas urgentes para garantizar la seguridad alimentaria en el país. Foto: composición LR.
Especialistas piden medidas urgentes para garantizar la seguridad alimentaria en el país. Foto: composición LR.

Las piñas que se venden en mercados y supermercados del Perú podrían representar un riesgo para la salud de los consumidores. Investigaciones recientes han detectado la presencia de agroquímicos en esta fruta tropical, superando los límites permitidos. Expertos advierten que la ingesta prolongada de estos químicos está vinculada con enfermedades crónicas como el cáncer y trastornos neurológicos.

La alerta surgió a partir de un comunicado público del fundador de la Asociación Peruana de Consumidores y Usuarios (ASPEC), Jaime Delgado, quien advirtió que las piñas contenían altos índices de pesticidas peligrosos.

El doctor en salud pública Omar Neyra, explicó que los pesticidas utilizados en la agricultura tienen efectos negativos en la salud dependiendo de la cantidad y frecuencia de consumo. "Estos químicos pueden generar cáncer, trastornos neurológicos (alzhéimer) y afectar el sistema inmunológico", señaló. Además, precisó que "aunque las frutas sean lavadas, muchos de estos pesticidas ya están incorporados en su estructura, lo que hace que su eliminación sea casi imposible".

El peligro oculto en tu mesa: ¿qué hay detrás de los pesticidas en la agricultura?

El médico Omar Neyra explicó que los pesticidas utilizados en la agricultura pueden generar afecciones graves si se consumen de manera constante. "Estos químicos están diseñados para eliminar plagas, pero cuando son ingeridos por el ser humano en altas concentraciones y de forma prolongada, pueden causar cáncer, trastornos neurológicos y mutaciones en el sistema inmunológico", advirtió.

Neyra agregó que la contaminación de las frutas por pesticidas no se limita solo a la piña, sino también a otros productos como la fresa. "No es solo un tema de una fruta en particular, sino de un sistema agrícola que permite el uso indiscriminado de pesticidas", señaló.

Además, enfatizó que lavar las frutas puede reducir la cantidad de residuos en la superficie, pero no garantiza la eliminación total de los pesticidas, ya que estos pueden penetrar en la estructura del alimento. "El Estado debe tomar medidas para reducir el uso de estos químicos y promover prácticas agrícolas seguras", agregó.

Por su parte, el exministro de Salud, Hernando Cevallos, señaló que en el Perú no existe un control riguroso sobre la cantidad y tipo de pesticidas utilizados en la agricultura. "La falta de regulación permite que muchos productos sean rociados con sustancias prohibidas o en niveles que representan un peligro para la salud. Es urgente que las autoridades realicen inspecciones y pruebas para garantizar que los alimentos que llegan a la mesa de los peruanos sean seguros", sostuvo.

Cevallos también criticó la falta de pronunciamiento del Ministerio de Salud sobre el tema, indicando que "el silencio de las autoridades no hace más que aumentar la incertidumbre de la población". Asimismo, advirtió que sin una respuesta oficial, el riesgo de una crisis de confianza en los productos agrícolas podría expandirse, afectando a los productores y comerciantes.

Tanto el exministro Cevallos como el doctor Neyra coinciden en que el consumo prolongado de esta fruta, contaminada con pesticidas, puede representar un riesgo grave para la salud. Ambos especialistas advierten que la exposición constante a estas sustancias químicas podría generar mutaciones en el sistema inmunológico, aumentando la probabilidad de desarrollar enfermedades como el cáncer y el Alzheimer.

Comerciantes preocupados por la salud de sus clientes ante posible contaminación de frutas

En una visita al mercado de Magdalena, los comerciantes de frutas demostraron desconocimiento sobre el tema. Tras informarles sobre este caso, algunos expresaron preocupación por la salud de sus clientes y buscaron orientación sobre cómo identificar piñas seguras. Sin embargo, otros admitieron que, a pesar del riesgo, deben seguir vendiendo para cubrir sus gastos diarios. "Nosotros confiamos en nuestros proveedores, pero si las autoridades no hacen nada, ¿qué podemos hacer?", mencionó uno de ellos.

Los vendedores también afirmaron que sus proveedores no les habían alertado sobre la posible contaminación de la fruta, lo que sugiere que el problema podría ser más amplio de lo que se conoce. "Si esto se extiende y afecta toda la producción, muchos de nosotros podríamos vernos perjudicados", añadieron.

Además, algunos comerciantes manifestaron su confianza en que sus proveedores no estarían distribuyendo frutas contaminadas, pero admitieron que no tienen herramientas para comprobarlo. "Confiamos en nuestros proveedores, pero si el problema se generaliza, todos salimos perdiendo", señaló uno de ellos.

Especialistas piden al Estado medidas para garantizar la seguridad alimentaria

Los especialistas y comerciantes coinciden en que el Estado debe actuar con rapidez para evaluar la magnitud del problema y garantizar la seguridad alimentaria. La implementación de controles más estrictos en la producción agrícola, así como campañas de información para los consumidores, podrían reducir el riesgo de exposición a estos pesticidas.

Cevallos subrayó que la situación requiere medidas drásticas para evitar un daño mayor. "No hay un control efectivo sobre los cultivos y cosechas en nuestro país. Necesitamos regulaciones más estrictas para evitar que productos con altos niveles de pesticidas lleguen al consumo masivo", concluyó.

Mientras las autoridades definen acciones, los consumidores deben tomar precauciones adicionales, como lavar y pelar las frutas antes de su consumo. Sin embargo, sin una solución estructural, la amenaza de los pesticidas en los alimentos seguirá siendo una preocupación latente en el país.