Ingeniera arequipeña destaca como oficial en una misión científica análoga a Marte y desafía estereotipos: "La ciencia no tiene género"
Felicitas Pila, ingeniera egresada de la UNSA, representó al Perú en la Misión Valquiria, una simulación de vida en Marte en Colombia. Durante dos semanas, enfrentó condiciones extremas y lideró investigaciones científicas clave.
Explorar Marte es un desafío que requiere preparación extrema. En un entorno aislado de Chía, Colombia, científicas latinoamericanas recrearon las condiciones del Planeta Rojo en la Misión Valquiria, una iniciativa pionera respaldada por la ONU (UNOOSA) y la OEI. Este proyecto análogo permitió probar nuevas tecnologías y evaluar el impacto físico y psicológico del aislamiento en una exploración espacial prolongada.
Entre las 14 tripulantes, la ingeniera peruana Felicitas Pila, egresada de la Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa (UNSA), destacó como oficial de relator y encargada del proyecto de robótica. Su participación no solo puso en alto el nombre del Perú, sino que también contribuyó a experimentos científicos clave para futuras misiones espaciales. Uno de los estudios desarrollados durante la simulación fue elegido por la NASA, resaltando la relevancia de esta misión análoga.
Ingeniera de la UNSA lidera una misión científica análoga a Marte
Desde el 23 de noviembre hasta el 8 de diciembre de 2024, las participantes de la Misión Valquiria enfrentaron desafíos similares a los que tendrían los astronautas en Marte. En el Hábitat Análogo de Exploración Espacial Simulada (HAdEES-C), ubicado en una zona remota de Colombia, experimentaron comunicación retrasada, agua limitada y temperaturas extremas.
Para Felicitas Pila, esta misión representó una oportunidad única para demostrar la capacidad de las mujeres en campos dominados por hombres. La ingeniera ha promovido la ciencia y la tecnología en el Perú a través de su labor en el NASA Space Apps Challenge en seis regiones del país. En la Misión Valquiria, su enfoque estuvo en robótica y exploración, además de documentar el proceso para futuras publicaciones científicas.
"La ciencia no tiene género", afirmó la ingeniera peruana, destacando la importancia de la colaboración femenina en la exploración espacial. Su experiencia permitió superar desafíos técnicos en entornos hostiles y demostrar la importancia del trabajo en equipo en escenarios de alta exigencia.
Agricultura en una misión espacial
Uno de los experimentos más innovadores de la Misión Valquiria fue la evaluación de la germinación de semillas en microgravedad simulada. Cada tripulante llevó especies representativas de su país para analizar su comportamiento en un entorno extremo. Entre los cultivos estudiados se incluyeron: cilantro, rúcula, berro, alfalfa, quinua, frijol mungo y acelga en luz azul.
El estudio permitió analizar la tasa de germinación y los cambios morfológicos en comparación con cultivos terrestres. Si bien algunas semillas lograron brotar, la alta temperatura provocó la disolución del medio de cultivo en gelatina y se identificó contaminación con microorganismos.
"Se buscaba evaluar la capacidad de estas especies en germinar y crecer en un ambiente que simula las condiciones de Marte", explicó Pila. Esta información será clave para diseñar sistemas de cultivo autosostenibles en futuras misiones interplanetarias.
Aportes científicos de la misión análoga a Marte
La Misión Valquiria también investigó los efectos del aislamiento en la salud física y mental de las astronautas análogas. Para ello, se realizaron exámenes médicos antes y durante la simulación, con especial atención en:
- Monitoreo de signos vitales y patrones de sueño.
- Evaluación del impacto del confinamiento en el estrés y ciclo menstrual.
- Ejercicios físicos diarios de una hora para mantener la condición física.
Durante la misión, las catorce tripulantes de Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, España, Guatemala, México, Perú y Uruguay realizaron actividades extravehiculares (EVAs) con trajes espaciales simulados, evaluaron el terreno con herramientas geológicas y probaron nuevas tecnologías robóticas. La capacidad de adaptación ante recursos limitados y la importancia del trabajo interdisciplinario fueron aspectos clave del experimento.
"Cada una cargaba una mochila de sacrificios", mencionó la ingeniera, aludiendo a la dificultad de estar separadas de sus familias. Sin embargo, la colaboración y el apoyo mutuo fortalecieron la resiliencia del equipo, demostrando la importancia del factor humano en la exploración espacial.
Un proyecto elegido por la NASA: impacto de la Misión Valquiria
El impacto de la Misión Valquiria trascendió las fronteras de América Latina. Uno de los proyectos científicos desarrollados durante la simulación fue elegido por la NASA, validando el aporte de las tripulantes en el campo de la exploración espacial.
Este reconocimiento resalta la relevancia de las misiones análogas como un paso previo fundamental para la llegada del ser humano a Marte. Además, reafirma el compromiso de la comunidad científica en el desarrollo de tecnologías que permitan la colonización del espacio.
"La educación es el inicio que encamina el cambio y cada desafío y cada nuevo conocimiento fortalece los cimientos", compartió Felicitas Pila al reflexionar sobre su experiencia. La Misión Valquiria no solo impulsó avances en biotecnología, robótica y salud, sino que también inspiró a futuras generaciones de científicas a seguir explorando el universo.