Desempleo oculto en Lima: 800.000 peruanos estarían sin trabajo, el doble del registro oficial
Según datos del INEI, 382.300 personas buscaron empleo activamente de enero a marzo de 2025. Sin embargo, un fenómeno silencioso eleva esta cifra: el desempleo real superaría el 12% en Lima, el doble de lo que se reporta oficialmente.
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Pese a que desde el Gobierno destacan una economía en expansión y con apetito de crecer 4% este año, el mercado laboral en Lima Metropolitana no logra recomponerse y sigue lejos de los niveles previos a la pandemia, e incluso de los registrados hace más de una década.
Según el último dato del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), la tasa de desempleo se ubicó en 6,6% entre enero y marzo de 2025 —una ligera disminución de un punto porcentual frente al mismo periodo del año anterior. Sin embargo, cálculos del desempleo real revelan que sería el doble de las cifras oficiales, superando el 12%.
En 2013, el 69% de las personas en edad de trabajar participaban activamente en el mercado laboral. En 2019, bajó a 67,7%. Hoy esa cifra ha caído a 64,4%. ¿Qué significa? No es que la gente haya optado por no trabajar, sino que muchos simplemente dejaron de buscar. Y eso —que no se ve en la tasa oficial— es desempleo oculto.
En el análisis del economista Juan Carlos Odar, la diferencia se explica por un fenómeno silencioso: el desaliento laboral. Es decir, peruanos que dejaron de buscar trabajo no porque ya no lo necesiten, sino porque sienten que no lo van a encontrar. Estas personas ya no son contadas como desocupadas en los datos oficiales, lo que oculta la magnitud del problema.

Según datos del INEI, 1 millón 960.000 trabajan en la precariedad.

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Si hoy la proporción de personas en edad de trabajar que participan activamente en el mercado laboral (PEA) fuera la misma que en 2013, el número de desempleados en la capital no sería de 382.000, sino de casi 800.000 personas, estima el también director de Phase Consultores. En ese escenario, la tasa de desempleo real llegaría a 12,8%, frente al 6,6% que reporta el INEI.
"Ya para el 2019, el desaliento había crecido frente al 2013 y ese proceso se ha intensificado en los últimos años en parte importante por la migración. Para una mejor medición de la situación, debemos mantener constante la relación de personas activas en el mercado laboral", apunta Odar.
Más empleo, pero más precario
De acuerdo al ente estadístico, el número de personas con empleo adecuado creció a 3,4 millones en el primer trimestre del 2025, es decir, aquellos que reciben los beneficios correspondientes a ley como gratificaciones y CTS, trabajan al menos 35 horas semanales y ganan al menos el sueldo mínimo. Incluso, este grupo viene creciendo más rápido que antes: de 1,8% por año en el periodo 2013-2019, a 2,2% entre 2019 y 2025, menciona Juan Carlos Odar.
Sin embargo, hay un problema que debería dimensionarse: el crecimiento de la población en edad de trabajar ha sido aún más fuerte, impulsado por la migración. Esto hace que, en proporción, el avance del empleo adecuado no sea suficiente para absorber a todos los nuevos trabajadores potenciales.

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Además, buena parte del empleo creado desde 2019 ha sido de baja calidad: más del 80% del nuevo empleo es subempleo por ingresos, es decir, personas que trabajan pero reciben menos de S/892, muy por debajo del sueldo mínimo hoy en S/1.130.

En promedio, los ingresos de los trabajadores en Lima compran 9% menos bienes y servicios que en 2019.
El mayor volumen de afectados recae en jóvenes que tienen entre 25 y 44 años, siendo la mayoría mujeres. La población subempleada por ingresos alcanzó a 1 millón 615.000 personas en dicho trimestre móvil (5,9 puntos porcentuales más que en 2019).
Por otro lado, 345.200 trabajan con insuficiencia de horas (subempleo visible), pese a que lo requieren, para el mismo periodo de estudio.
Según registra el INEI al primer trimestre del 2025, son 1 millón 960.000 personas en Lima metropolitana que se encontraron en situación de subempleo, es decir, se desempeñaron en condiciones laborales precarias. En comparación con el periodo prepandemia de 2019, el subempleo en la capital aumentó en 188.000 personas.
Desde la otra orilla, 3 millones 488.500 en Lima están adecuadamente empleados, es decir reciben los beneficios correspondientes a ley como pago de CTS, gratificaciones, entre otros.

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Ingresos no se recuperan
Según el exviceministro de Empleo, Fernando Cuadros, a la fecha, no se ha podido recuperar el poder de compra de los ingresos laborales prepandemia. "En promedio, los ingresos de los trabajadores en Lima compran 9% menos bienes y servicios que en 2019", sostiene.
Recordó que entre los años 2021 y 2023 hubo un considerable incremento en el costo de vida, generado fundamentalmente por el alza de los precios de alimentos y energía, "lo cual erosionó la capacidad adquisitiva de bienes y servicios de los trabajadores, sobre todo la de aquellos con bajos ingresos, que son la mayoría en el país".
Para atenuar esta cruda realidad laboral, propone ampliar recursos presupuestales del programa Trabaja Perú para generar una mayor cantidad de empleos e ingresos temporales para los más vulnerables, a nivel urbano y rural, considerando el incremento de la pobreza.
También, refiere Cuadros, "se debe aplicar un subsidio temporal a la seguridad social en salud y pensiones para incentivar la contratación formal y estable en MYPEs, sobre todo de jóvenes, segmento al que le cuesta acceder a empleos formales".
Otra de sus propuestas es dotar de mayores recursos presupuestales al programa de mejora de la empleabilidad del Ministerio de Trabajo para ampliar su cobertura a nivel nacional.