Sociedad

Minsa rechazó financiamiento del Banco Mundial y pone en riesgo la salud pública, según especialistas

Extrañas jugadas. El Ministerio de Salud rechazó el financiamiento de más de S/300 millones, argumentado poco avance. Ante esta decisión, exautoridades y especialistas advierten un grave retroceso en la capacidad del país para enfrentar futuras epidemias

Ciencia moderna. El dinero ofrecido por el BM iba a ser destinado a mejorar el equipamiento de los laboratorios del INS a nivel nacional. Foto: Difusión
Ciencia moderna. El dinero ofrecido por el BM iba a ser destinado a mejorar el equipamiento de los laboratorios del INS a nivel nacional. Foto: Difusión

El Ministerio de Salud, al mando de César Vásquez, rechazó un financiamiento de más de 300 millones de soles otorgado por el Banco Mundial. Esta decisión ha generado preocupación entre exautoridades y especialistas, quienes advierten que cancelar este financiamiento pone en riesgo la capacidad del país para enfrentar futuras epidemias, fortalecer los laboratorios regionales y consolidar una vigilancia sanitaria moderna.

En tanto, César Vásquez afirma con orgullo: “Yo llegué y le puse el pare al Banco Mundial”. Asimismo, asegura que la presidenta Dina Boluarte respalda su decisión.

De acuerdo a información conocida el pasado fin de semana, el giro drástico en el proyecto fue consecuencia de un desacuerdo con el organismo internacional sobre la designación de Consuelo Perales Mesta como coordinadora de la unidad ejecutora.

Perales, docente de profesión, habría generado controversia debido a sus presuntos vínculos con Alianza para el Progreso, el partido del ministro Vásquez y la familia Acuña.

 El Minsa rechazó un financiamiento del Banco Mundial. Foto: Carlos Félix

El Minsa rechazó un financiamiento del Banco Mundial. Foto: Carlos Félix

Intereses ocultos

Para el exministro de Salud Óscar Ugarte, resulta inaceptable que el Minsa haya cancelado el financiamiento del Banco Mundial. Según Ugarte, la ruptura de los acuerdos se debe a la negativa del ministerio a cumplir con un compromiso establecido en 2021, en el que se acordó que el Banco Mundial financiaría una parte del proyecto con 68 millones de dólares, y que supervisaría la contratación de los puestos clave de la unidad ejecutora.

"Esto es lo que no acepta el ministro, porque él prefiere nombrar a quienes se le ocurren, a su gente de confianza. Lo de los intereses es solo una excusa, ya que los intereses que cobra el Banco Mundial son los más bajos a nivel internacional, apenas un 6.5% anual", afirmó a La República.

Asimismo, recordó que el objetivo de este préstamo fue claramente identificado por el propio ministerio tras la pandemia, ya que, según sostuvo, uno de los principales problemas durante la crisis sanitaria fue la falta de capacidad de diagnóstico.

Esto debido a que no se contaba con suficientes pruebas para detectar el virus del COVID-19, ni con los laboratorios adecuados para realizar los análisis correspondientes.

 Este presupuesto estaba destinado a ejecutar un proyecto relacionado con el control de nuevas enfermedades o pandemia. Foto: Carlos Félix

Este presupuesto estaba destinado a ejecutar un proyecto relacionado con el control de nuevas enfermedades o pandemia. Foto: Carlos Félix

Ugarte aseguró que este proyecto tiene como fin fortalecer los laboratorios de salud pública, encargados de detectar virus y bacterias, como las que causan el dengue, la malaria y el COVID-19, así como otras enfermedades emergentes o reemergentes.

“Este esfuerzo incluye la instalación de laboratorios en todas las regiones y el desarrollo de capacidades del personal, con el objetivo de adelantarnos a problemas de salud pública, como las enfermedades transmisibles, que, debido al calentamiento global, aumentan”,dijo.

Futuro incierto en salud

Omar Neyra, especialista en salud pública, explica que el proyecto buscaba establecer una red de laboratorios y biobancos en Perú, con el fin de avanzar en medicina de precisión. Menciona que el Banco Mundial había acordado financiar esta iniciativa para mejorar la respuesta del país a diversas patologías, como lo evidenció la pandemia.

“Vamos a dejar de ser elegibles para este tipo de financiamiento en los próximos años, porque somos un país que rechaza este tipo de actividades en mejora de la salud y otros aspectos importantes. Lamentablemente, es un problema que afecta prácticamente a todos”.

César Vásquez olvida que actual gestión lleva 28 meses. Foto: Difusión

César Vásquez olvida que actual gestión lleva 28 meses. Foto: Difusión

En cuanto al financiamiento de la Autoridad Nacional de Infraestructura, señaló que no se sabe de dónde saldría el dinero. Y afirma que, en lugar de destinar recursos a proyectos sin claridad, se podría estar sacrificando fondos para hospitales y medicamentos, lo que afectaría directamente a la atención sanitaria.

“Al final, quien más pierde es el ciudadano peruano, porque no se podrá avanzar con proyectos clave para la salud pública. Esta iniciativa era el primer paso, la base para alcanzar una medicina moderna, como ya ocurre en otros países. Hoy, en el primer mundo, los tratamientos son biológicos, y este proyecto era el punto de partida. No lo era todo, pero sí el inicio. Ahora, todo se retrasará y seguiremos dependiendo de medicamentos del siglo pasado”, advirtió.

Minsa responde

Por su parte, el ministro de Salud, César Vásquez, indicó a La República que la cancelación del préstamo no está relacionada con una funcionaria, sino con motivos más graves. Reveló que el proyecto, que debía completarse al 100 % en diciembre de 2024, apenas ejecutó un 7.8% bajo la dirección de funcionarios contratados directamente por el Banco Mundial.

"La funcionaria que mencionan algunos medios fue contratada recién en enero de este año, sin objeciones, y cuando ya se había tomado la decisión de cerrar el préstamo. Su único rol es realizar el cierre administrativo del proyecto hasta mayo de este año. No tiene vínculos políticos ni estuvo en la etapa crítica del proyecto", precisó.

Sobre que el Estado asuma el gasto en lugar de aceptar cooperación internacional, explicó que se trataba de un préstamo, no de una donación. Señaló que implicaba intereses y condiciones que impedían corregir errores. "De todas maneras, los 68 millones de dólares iban a salir del presupuesto público. Esos recursos se usarán de manera eficiente, sin pagar intereses, sin contratos blindados".

Además, señaló que se han detectado 36 informes de la Contraloría que señalan irregularidades, sobrecostos y mala gestión. “Al ritmo que íbamos, solo Dios sabe si esto se iba a terminar. Se acabaron las consultorías millonarias sin resultados. Ahora se trabaja por metas y con responsabilidad”, dijo Vásquez a modo de explicación.

Precisó que no están en contra del Banco Mundial, sino en contra de la metodología que implementaron.

Colegio Médico advierte grave retroceso

Ante esta situación, el Colegio Médico del Perú (CMP) expresó su profunda preocupación y advirtió que esta decisión representaría un grave retroceso en la capacidad de respuesta sanitaria del país.

En su comunicado, el gremio médico advirtió que la cancelación del proyecto dejaría al Perú sin una alternativa clara para asegurar la continuidad de la modernización del sistema de vigilancia.

“Ello representaría un retroceso en la tan necesaria implementación de una vigilancia adecuada y descentralizada frente a enfermedades como el dengue, la influenza aviar o cualquier futura amenaza epidemiológica”, señala el documento.

Aunque el Minsa ha indicado que existen observaciones sobre la transparencia en la ejecución del proyecto, el Colegio Médico subraya que tales cuestionamientos deben ser investigados por las autoridades competentes y, en caso de confirmarse, sancionados.

No obstante, enfatizaron que estos problemas no deben ser excusa para renunciar al apoyo técnico y financiero internacional sin garantizar un plan alternativo que asegure la continuidad del fortalecimiento del sistema sanitario.

El CMP hizo un llamado urgente al Gobierno para que reformule su postura, recordando que la salud pública debe ser protegida por encima de cualquier interés político o administrativo. Demandaron una solución técnica, transparente y responsable que evite poner en riesgo a millones de peruanos.

“La salud pública no puede retroceder”, enfatizó el Colegio Médico, al recordar que la vigilancia epidemiológica robusta es clave para detectar y controlar brotes infecciosos a tiempo.