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Cadena estadounidense destaca historia de pescador peruano que sobrevivió más 90 días a la deriva en el mar comiendo tortugas y pájaros

Máximo Napa, un pescador peruano de 61 años, logró mantenerse con vida durante 95 días en el océano Pacífico tras perderse en altamar. Su odisea concluyó con un dramático rescate frente a la costa de Chimbote, en el norte de Perú.

El pescador peruano Máximo Napa sobrevivió 94 días a la deriva en el océano Pacífico alimentándose de tortugas, aves y cucarachas. Foto: composición LR/ captura
El pescador peruano Máximo Napa sobrevivió 94 días a la deriva en el océano Pacífico alimentándose de tortugas, aves y cucarachas. Foto: composición LR/ captura

La resistencia humana no tiene límites y la historia de Máximo Napa lo confirma. Este pescador peruano, de 61 años, pasó 95 días a la deriva en el océano Pacífico sin medios de comunicación ni provisiones suficientes. Perdido en altamar, se vio obligado a alimentarse de tortugas, aves marinas e incluso cucarachas para sobrevivir.

El caso ha captado la atención de medios internacionales, entre ellos la cadena estadounidense CBS News, que destacó su impactante testimonio. El pescador logró resistir la desesperación gracias al recuerdo de su madre y su nieta de dos meses. Su increíble hazaña ha generado asombro y se suma a otras historias de supervivencia extrema en el océano.

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Pescador peruano sobrevive 95 días a la deriva en el mar

La pesadilla de Máximo Napa comenzó el 7 de diciembre, cuando zarpó desde el puerto de San Juan de Marcona, en la región de Ica. Su intención era regresar el mismo día tras una jornada de pesca, pero una fuerte tormenta y las corrientes marinas lo alejaron de su ruta, dejándolo a la deriva. Al no contar con una radiobaliza para emitir señales de emergencia, nadie pudo rastrear su ubicación.

Sin agua potable ni comida, Napa recurrió a su instinto de supervivencia. Atrapar tortugas y pájaros con sus propias manos se convirtió en su única fuente de alimento. También consumió cucarachas y bebió agua de lluvia para mantenerse hidratado. Durante semanas, enfrentó temperaturas extremas, el intenso sol del día y el frío de la noche.

El 12 de marzo, tras 94 días en altamar, un barco ecuatoriano lo avistó y alertó a las autoridades peruanas. La Marina de Guerra del Perú difundió imágenes del rescate, donde se observa a un Napa visiblemente debilitado, pero en condiciones sorprendentemente estables. Luego de recibir atención médica en un hospital de Paita, fue dado de alta.

"No quería morir por mi madre. Tengo una nieta de dos meses; me aferré a eso. Todos los días pensaba en mi madre", declaró Napa en una emotiva entrevista. Su hija, Inés Napa, afirmó que la familia nunca perdió la esperanza y calificó el rescate como un verdadero milagro.

Para su familia, el regreso del pescador es un renacer. Su sobrina, Leyla Torres Napa, anunció que celebrarán su cumpleaños de manera especial, ya que, durante su tiempo en el mar, solo pudo comer una pequeña galleta el día de su natalicio.

Historias de supervivencia en altamar

El caso de Máximo Napa no es único. En los últimos años, otros navegantes han protagonizado historias similares, demostrando la capacidad del ser humano para resistir situaciones extremas en el océano.

Uno de los casos más recientes ocurrió en octubre de 2024, cuando el ruso Mijaíl Pichugin pasó más de dos meses a la deriva en el mar de Ojotsk. La embarcación en la que viajaba con su hermano y su sobrino sufrió una avería, dejándolos sin posibilidad de regresar a tierra. Pichugin sobrevivió bebiendo agua de lluvia y soportando las bajas temperaturas. Lamentablemente, sus familiares no lograron resistir, y él tuvo que atar sus cuerpos a la lancha para evitar que las corrientes los arrastraran.

En el 2023, otro caso impactante fue el de Tim Shaddock, un marinero australiano de 51 años que sobrevivió más de dos meses en el Pacífico junto a su perra Bella. Su embarcación quedó a la deriva tras un fallo en el sistema eléctrico. Shaddock logró mantenerse con vida gracias a la pesca y al agua de lluvia hasta ser rescatado por un barco atunero.