Estados Unidos

Hope Florida: cómo funciona la fundación de la esposa de Ron DeSantis cuestionada por presunta malversación de fondos

Hope Florida, liderada por Casey DeSantis, enfrenta cuestionamientos tras recibir fondos estatales de manera directa. Legisladores investigan su manejo y transparencia

La fundación fue establecida formalmente en 2021 impulsada por Casey DeSantis y cuenta con respaldo legislativo. Foto: Composición LR.
La fundación fue establecida formalmente en 2021 impulsada por Casey DeSantis y cuenta con respaldo legislativo. Foto: Composición LR.

La fundación Hope Florida, una iniciativa promovida por Casey DeSantis, esposa del gobernador de Florida Ron DeSantis, está bajo el investigación pública tras una controvertida transferencia de fondos estatales. La asignación de US$10 millones provenientes de un acuerdo legal con una corporación de servicios médicos encendió el debate en la legislatura de Florida. Las críticas giran en torno a la falta de supervisión legislativa en el uso de estos recursos.

Hope Florida se presenta como un programa de apoyo comunitario que vincula a personas necesitadas con entidades privadas, religiosas y sin fines de lucro. Aunque ha sido reconocida como una herramienta para reducir la dependencia del estado, los cuestionamientos sobre la transparencia en su operación y manejo financiero plantean serias interrogantes sobre su gestión.

Qué es Hope Florida y cuál es su objetivo

Hope Florida fue creada en 2021 con el respaldo de Casey DeSantis como parte de los esfuerzos estatales por fortalecer el tejido social. El programa emplea “navegadores de esperanza”, funcionarios estatales encargados de identificar las necesidades de las personas y conectarlas con recursos locales. La iniciativa busca aprovechar al máximo las estructuras existentes sin duplicar esfuerzos gubernamentales.

El enfoque del programa radica en disminuir la dependencia de los servicios estatales mediante la colaboración con organizaciones comunitarias. Desde su creación, Hope Florida ha trabajado con diversos sectores, ofreciendo soluciones personalizadas a quienes enfrentan barreras económicas y sociales. Sin embargo, las críticas recientes sobre su financiamiento han desviado la atención de sus logros hacia sus controversias.

La polémica por la transferencia de fondos estatales

El origen de las sospechas se encuentra en un acuerdo extrajudicial entre la Agencia para la Administración del Cuidado de la Salud de Florida (AHCA) y Centene Corporation. Este acuerdo, que resolvió un caso de sobrepagos relacionados con Medicaid, resultó en una compensación de US$67 millones. De esa suma, US$10 millones fueron transferidos directamente a Hope Florida.

La transferencia, realizada sin la intervención del Congreso estatal, fue calificada como irregular por legisladores y expertos. Según la normativa vigente, los fondos provenientes de acuerdos legales deberían ingresarse al fondo general del estado o un fideicomiso supervisado por la legislatura. Este procedimiento no se cumplió, lo que desató una investigación en la Cámara de Representantes de Florida.

Las implicaciones políticas de la gestión de Hope Florida

La controversia se intensificó cuando se descubrió que Hope Florida había transferido los US$10 millones a otras organizaciones. Dos de ellas, Secure Florida’s Future y Save Our Society from Drugs, recibieron US$5 millones cada una. Estas entidades tienen vínculos con el ámbito político del estado y han financiado actividades vinculadas al partido Republicano, incluyendo un comité liderado por un exasesor de Ron DeSantis.

El gobernador defendía la legalidad de la operación, argumentando que las críticas son intentos de desacreditar a su esposa y dañar su reputación.