Estados Unidos

Adiós a las zonas sensibles: el plan de Trump facilitará la deportación de los inmigrantes en Estados Unidos

La administración de Donald Trump tiene planes para reformar las políticas de inmigración en Estados Unidos y suprimir las restricciones en áreas sensibles, lo que ha aumentado la preocupación en las comunidades migrantes.

Donald Trump evalúa una medida para que los inmigrantes no puedan protegerse en zonas sensibles. Foto: Composición LR
Donald Trump evalúa una medida para que los inmigrantes no puedan protegerse en zonas sensibles. Foto: Composición LR

El gobierno de Estados Unidos, encabezado por Donald Trump en 2025, planea decirle adiós a las zonas sensibles para inmigrantes, incluyendo un plan para cambiar las políticas migratorias de protección. Estas áreas, que incluyen escuelas, hospitales y lugares de culto, han sido refugios para los inmigrantes, brindándoles seguridad frente a detenciones por parte de agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés).

Según fuentes cercanas al equipo de transición, el plan busca flexibilizar la actuación de ICE, eliminando restricciones que actualmente limitan las operaciones en zonas sensibles para inmigrantes. Aunque aún no es oficial, esta propuesta ya genera preocupación entre defensores de derechos civiles y comunidades inmigrantes que temen un riesgo al acceder a servicios esenciales.

¿Qué son las zonas sensibles y cómo protegen a los inmigrantes?

Las zonas sensibles para inmigrantes son áreas designadas por políticas migratorias donde las autoridades limitan sus acciones de control y detención. Este enfoque, implementado formalmente en 2011 durante la administración de Barack Obama, fue ampliado bajo el gobierno de Joe Biden para incluir nuevos espacios, como refugios para personas sin hogar, centros de atención a víctimas de violencia doméstica y parques infantiles. Estas medidas buscan proteger a las comunidades vulnerables y garantizar que estos espacios permanezcan seguros y accesibles para quienes los necesitan.

En zonas sensibles para inmigrantes, ICE enfrenta limitaciones en cuanto a detenciones, arrestos o actividades de vigilancia, salvo en casos excepcionales relacionados con amenazas a la seguridad nacional, terrorismo o riesgos inminentes de violencia. Esta normativa ha facilitado que los inmigrantes, incluso aquellos en situación irregular, puedan llevar a cabo actividades diarias como acompañar a sus hijos a la escuela, asistir a consultas médicas o participar en servicios religiosos, sin el temor constante de ser detenidos.

Estas medidas no solo aseguran la protección de las personas, sino que también buscan fortalecer la seguridad en zonas vulnerables, fomentando la confianza mutua entre las autoridades locales y las comunidades migrantes.

¿Por qué Trump quiere cambiar la política migratoria en zonas sensibles?

El equipo de Donald Trump ha expresado su intención de modificar las políticas migratorias vigentes desde el inicio de su mandato. Según diversos informes, una de sus principales prioridades sería eliminar las restricciones en las zonas sensibles para inmigrantes, con el fin de acelerar los procesos de deportación y otorgar una mayor flexibilidad operativa al ICE.

Esta propuesta permitiría a los agentes actuar sin limitaciones en zonas sensibles para inmigrantes, incluso en espacios como escuelas, hospitales o iglesias. Para los defensores de los derechos de los inmigrantes, esto podría tener consecuencias graves, como el miedo de los indocumentados a buscar atención médica, reportar crímenes o testificar en juicios, lo que afectaría tanto la salud pública como la seguridad comunitaria.

Un portavoz de una organización de derechos civiles advirtió que, si las personas temen ser arrestadas en áreas sensibles, el impacto no solo afectará a los inmigrantes, sino a toda la sociedad en su conjunto.

¿Desde cuándo existen las zonas sensibles?

La política de zonas sensibles para inmigrantes se implementó oficialmente en 2011 durante la administración de Barack Obama, con el objetivo de humanizar las medidas de control migratorio. En sus inicios, estas áreas abarcaban únicamente escuelas, hospitales y lugares de culto.

En 2021, la administración de Joe Biden amplió las áreas sensibles para los inmigrantes, incorporando lugares como refugios para personas sin hogar, centros de atención a víctimas de violencia doméstica y parques infantiles. Esta extensión tenía como objetivo ofrecer una mayor protección a las comunidades vulnerables y asegurar su acceso a servicios esenciales sin el temor de ser deportados.

Durante más de diez años, las zonas sensibles para inmigrantes han jugado un papel crucial en la búsqueda de un balance entre las políticas de control migratorio y la protección de los derechos humanos. La posible eliminación de estas zonas en el marco del plan de Trump genera interrogantes importantes sobre el rumbo futuro de la política migratoria en Estados Unidos.

¿Cuáles son las zonas sensibles en EE. UU?

En Estados Unidos, el concepto de "zonas sensibles" hace referencia a áreas en las que las autoridades migratorias, como el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), enfrentan restricciones para llevar a cabo operativos, detenciones o acciones de control migratorio. Estas limitaciones tienen como objetivo garantizar que las personas puedan acceder a servicios fundamentales y ejercer sus derechos sin temor a represalias relacionadas con su estatus migratorio.