Espectáculos

Tamara Falcó, hija de Isabel Preysler, comparte reflexiones tras el fallecimiento de Mario Vargas Llosa: “El día más triste del año”

Tamara Falcó ha guardado silencio tras el fallecimiento de Mario Vargas Llosa, con quien estuvo cerca durante los años que compartió con su madre Isabel Preysler.

La hija de Isabel Preysler convivió estrechamente con Mario Vargas Llosa durante los 8 años de relación amorosa entre él y su madre. Foto: Composición LR/difusión
La hija de Isabel Preysler convivió estrechamente con Mario Vargas Llosa durante los 8 años de relación amorosa entre él y su madre. Foto: Composición LR/difusión

La muerte de Mario Vargas Llosa el pasado 13 de abril, a los 89 años, dejó una profunda huella tanto en el mundo literario como en quienes compartieron momentos cercanos con él. El escritor peruano, autor de obras emblemáticas como 'La ciudad y los perros', pasó buena parte de su vida en España, donde también fue ampliamente conocido por su mediática relación con Isabel Preysler. Durante los ocho años que duró ese vínculo, convivió estrechamente con los hijos de la socialité, especialmente con Tamara Falcó, quien siempre le guardó un afecto especial.

A pesar de que la relación entre Vargas Llosa y Preysler terminó de forma abrupta y rodeada de controversia, el lazo del Nobel con la familia se mantuvo cercano durante un tiempo. Tamara Falcó, figura mediática española, llegó a referirse a él con cariño como 'Tito' y destacó en su reality de Netflix 'La Marquesa', lo importante que fue su presencia en su vida. Sin embargo, la relación se habría roto tras la publicación de 'Los vientos', donde el peruano aparentemente criticó el estilo de vida de la familia de su ex Isabel Preysler. Ahora, en plena Semana Santa y tras la noticia de su fallecimiento, Tamara Falcó ha compartido un mensaje cargado de espiritualidad y reflexión, describiendo este momento como “el día más triste del año”.

Tamara Falcó hizo una profunda reflexión tras la muerte de Mario Vargas Llosa

El fallecimiento de Mario Vargas Llosa generó una oleada de reacciones públicas, especialmente en España, donde vivió durante muchos años. Entre las figuras más observadas estuvo Tamara Falcó, hija de Isabel Preysler, quien mantuvo una relación cercana con el Nobel durante los años que compartió con su madre. Si bien Preysler ha optado por el silencio ante la noticia, medios españoles informaron que la pérdida la entristeció profundamente. Por su parte, la marquesa de Griñón también ha mantenido la discreción, aunque ha compartido en redes sociales varios mensajes que invitan a la reflexión.

Conocida por su fuerte fe católica, Tamara ha encontrado en la Semana Santa un espacio para expresar sus emociones desde una perspectiva espiritual. Este 17 de abril, en Jueves Santo, publicó en sus historias de Instagram: “Hoy celebramos el Jueves Santo. Os invito a parar, reflexionar y hacernos conscientes del acto de amor y humildad que nos enseñó Jesús”. Sin aludir directamente a Mario Vargas Llosa, el contenido de sus publicaciones sugiere un estado de introspección profundo en medio de los días de duelo.

 Tamara Falcó compartió mensaje por Semana Santa. Foto: instagram.

Tamara Falcó compartió mensaje por Semana Santa. Foto: instagram.

El Viernes Santo, su mensaje fue aún más emocional: “Viernes Santo, el día más triste del año donde parece que el príncipe de este mundo ha vencido. Juntos en la cruz con Cristo”. Aunque la hija de Isabel Preysler no menciona al escritor peruano en ninguna de sus publicaciones, el contexto y el momento de sus palabras han sido interpretados como una forma velada de despedida de una figura significativa en su vida.

La emotiva carta que Mario Vargas Llosa dejó a sus hijos antes de morir

Mario Vargas Llosa, una de las voces más influyentes de la literatura contemporánea, falleció tras enfrentar una enfermedad incurable diagnosticada en 2020. Según reveló el periodista Jaime Bayly, el Nobel peruano escribió una carta íntima dirigida a sus tres hijos, Álvaro, Morgana y Gonzalo, en la que compartió no solo detalles de su diagnóstico, sino también sus sentimientos más profundos y sus deseos finales. Aunque el tratamiento permitía prolongar su vida, el autor de 'La fiesta del Chivo' asumió con serenidad que el desenlace era inevitable y quiso prepararse rodeado del cariño de su familia.

En la carta, Vargas Llosa expresó su amor incondicional hacia sus hijos y los animó a enfrentar su partida con entereza. Además, dejó claras sus últimas voluntades: pidió ser incinerado y que sus cenizas fueran esparcidas en el mar de Paracas, un lugar muy especial para él. Jaime Bayly describió la misiva como un texto lleno de honestidad y profundidad, fiel al estilo del escritor, y destacó que fue una de sus expresiones más personales, marcando el cierre de una vida dedicada a las letras y a la reflexión sobre la condición humana.