Sociedad

Crisis carcelaria: se acerca el plazo de cierre de seis penales hacinados

Es en mayo. Los 68 reclusorios del país tienen una capacidad para 41.764 internos, pero albergan a 99.448. Hay una sobrepoblación de 57.684. El próximo mes se vence el pazo que el TC dio al Estado para enfrentar esta problemática declarada inconstitucional, y la respuesta del sector Justicia y el INPE es ampliaciones y proyectos a futuro.

Sobrepoblación en cárceles. Foto: INPE
Sobrepoblación en cárceles. Foto: INPE

Andrés Ramos extraña sus días en el penal de Huaral, donde estuvo preso por homicidio durante más de una década. Tenía biblioteca, talleres, servicio médico, visitas y compartía celda con dos internos.

“Era mucho mejor”, dice sin dudar. Parecía el paraíso en comparación con el actual establecimiento en el que lleva siete meses. Este surquillano, de 63 años, vive encerrado con otros nueve condenados en un calabozo oscuro y sin ventilación, distinto al que tuvo antes.

Y es que hoy las cárceles peruanas se caracterizan por el hacinamiento, graves deficiencias en servicios básicos y asistenciales, el imperio de la violencia, la corrupción y la carencia de oportunidades y medios para la resocialización de los reclusos.

No hay espacio para 57.000 internos

De acuerdo con las Unidades de Registro Penitenciario, hasta diciembre de 2024, las 68 cárceles del país tenían una capacidad de albergue de 41.764 internos, pero hoy tienen una población de 99.448 (238% de exceso). Es decir, hay una sobrepoblación de 57.684 internos.

El hacinamiento ha llegado a niveles críticos, y en mayo vence el plazo que el Tribunal Constitucional (TC) dio al Estado para enfrentar esta problemática, declarada inconstitucional en una histórica sentencia de 2020.

Gobierno anunció creación de nuevo penal con inteligencia artificial. Foto: INPE

Gobierno anunció creación de nuevo penal con inteligencia artificial. Foto: INPE

El fallo surgió tras una denuncia por condiciones inhumanas en el penal de Tacna y obligaba al Ejecutivo a tomar medidas urgentes o de lo contrario cerrarían temporalmente los seis penales más hacinados del país.

Cinco años después, muy poco se ha hecho para mejorar la situación. El penal del Callao es un ejemplo de la gravedad del problema. Con una infraestructura diseñada para 572 reclusos, actualmente alberga a 3.363.

Respuesta al problema: obras a futuro

Ante esta situación, el jefe del INPE, Javier Llaque, ha señalado que cuando se dictó el fallo del TC no se había construido ninguna cárcel desde 2015 y bajo su gestión se han edificado tres pabellones en cárceles hacinadas.

Ha dicho también que para este año se cuenta con S/2.000 millones en operaciones de endeudamiento que se emplearán en la construcción de nuevos penales que permitirán ampliar la capacidad de albergue para reclusos.

También anunció que este año se iniciará la construcción del penal Ancón 3, con capacidad para 2.500 unidades de albergue. Será a través de una operación de endeudamiento con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Además, se iniciará la construcción del penal de Colquepata, en Cusco, con apoyo de la CAF.

Autoridades en Tacna rechazan envío de más reclusos a Challapalca. Foto: INPE

Autoridades en Tacna rechazan envío de más reclusos a Challapalca. Foto: INPE

Adicionalmente, dijo que el Gobierno presentó a varios empresarios un programa de obras por impuesto, de hasta S/1.400 millones, para el equipamiento de los penales.

Y recordó que este año se inició la construcción del penal de Abancay, que tendrá 800 unidades de albergue; en mayo se reiniciarán las obras en el penal de Pucallpa, con 1.200 unidades de albergue, y en junio se reinicia el penal de Arequipa, con 800 unidades de albergue. En suma, nada que mostrar antes de mayo.

Reclusorios están al límite

Las cárceles están al límite y ya no pueden recibir a más internos, lo que agrava la inseguridad jurídica y los riesgos sanitarios, sostiene Leonardo Caparrós, exjefe del INPE, quien advierte que, de los 68 penales que tiene el país, al menos 49 están hacinados.

El incremento ha sido progresivo durante los últimos años. En la región norte (Chiclayo) hay una capacidad de albergue de 6.946, pero se tiene una población de 19.249; es decir, una ocupación del 277%, con una sobrepoblación de 12.303. La región Lima, en tanto, tiene una capacidad para 17.608, pero hay una población de 46.141; o sea, hay 28.533 internos sin espacio, sin camas y sin celdas.

La región sur (Arequipa) está igual de crítica. Tiene una capacidad de albergue para 1.252 reos, pero mantiene una población penal de 4.447. Es decir, tiene una sobrepoblación de 3.195, con un hacinamiento del 255%.

Hacinamiento en cárceles de Perú es preocupante. Foto: INPE

Hacinamiento en cárceles de Perú es preocupante. Foto: INPE

Igual está la región centro (Huancayo) que tiene capacidad para 2.352 reos, pero cuenta con una población penal de 7.202 y una ocupación de 306%. Actualmente, tiene una sobrepobación de 4.850 presos.

El oriente (Huánuco) tiene una capacidad de albergue de 3.240, con una población penal de 6.994 y una ocupación de 216%, con una sobrepoblación de 3.754 internos. El suroriente (Cusco) tiene una capacidad de 2.918 con una población penal de 6.450 (221%). Tiene una sobrepoblación de 3.532.

La única que no tiene hacinamiento es la región nororiente (San Martín), que tiene una capacidad de albergue de 5.560 con una población penal de 6.198 (11%).

Megapenal a futuro

¿Y qué más está haciendo Gobierno? Esta semana se aprobó el expediente técnico para reanudar la construcción del megapenal de Ica que estaba paralizada desde el año 2020 por problemas técnicos y legales.

El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Eduardo Arana, dijo que para atender el problema de hacinamiento en los penales, su despacho ha trabajado en el destrabe y reanudación de esta infraestructura.

Gobierno peruano evalúa creación de nuevos penales. Foto: INPE

Gobierno peruano evalúa creación de nuevos penales. Foto: INPE

Y anunció que en las próximas semanas se estará inaugurando en Challapalca un nuevo pabellón de máxima seguridad que contará con el uso de inteligencia artificial (IA) para el control y vigilancia de los internos.

Ahora bien, el primer pabellón que cuenta con herramientas IA se implementó en el penal Ancón I, a inicios de este año.

Arana admitió que en los últimos años la política penitenciaria no se ha desarrollado conforme a las necesidades del país. “En los últimos diez años no se asignó presupuesto”.

Nuevos desafíos

El continuo crecimiento de la población penitenciaria plantea serios desafíos para el sistema carcelario. Las cifras actuales impactan negativamente en las condiciones de vida, la rehabilitación social y la seguridad dentro de los centros de detención.

Según expertos, esta sobrepoblación exacerba problemas como la violencia, la falta de acceso a servicios básicos y el deterioro de la infraestructura.

A fines del año pasado, la crisis de hacinamiento presentaba un déficit de 57.000 plazas. Por eso, el MINJUSDH ha desarrollado la llamada Política Penitenciaria al 2030 con seis objetivos claros y 27 lineamientos.

Entre las acciones destacadas están la construcción de 600 nuevas unidades de albergue en los penales de Puno (224) Lampa (208) e Iquitos (208), para reducir el hacinamiento y brindar condiciones más dignas a los internos.

También se encuentran en construcción nuevos penales en Cajamarca, Huánuco y Lima entre este y el próximo año, así como ampliaciones en Trujillo y Arequipa. Además, se ha adjudicado la construcción del penal de Abancay y se retomará el megapenal de Ica

Hay 5.188 extranjeros presos, entre ellos 3.814 venezolanos

En cuanto a extranjeros, en total son 5.188 presos (4.840 hombres y 348 mujeres). De ellos, 3.033 son procesados (2.809 son hombres y 224 mujeres) y 2.155 están sentenciados (2.031 hombres y 124 mujeres).

De este universo, el 73,5% es de nacionalidad venezolana. Esa población se ha multiplicado en casi 80 veces en los últimos 7 años, sostiene el ingeniero y analista de datos Juan Carbajal.

Asegura que, de los 48 internos de esa nacionalidad que había en el 2018, en diciembre del 2024 aumentó nada menos que a 3.814.

El incremento, dice el experto, se percibe desde mediados del 2018, siendo más notorio desde mediados del 2020, en plena pandemia. En ese periodo también aumentaron los internos colombianos de 470 a 755, mientras que los ecuatorianos de 110 se elevaron a 161 reclusos.