Sociedad

Educación excluida: 58% de niños con discapacidad e indígenas no van a la escuela

El representante de Unicef en Perú, Javier Álvarez, instó a la comunidad educativa a fortalecer su compromiso con la educación inclusiva y aseguró que es la clave para garantizar aprendizajes de calidad para todos los niños, niñas y adolescentes del país.

En Loreto y Ucayali están los indicadores más preocupantes.  Solo el 9% y 16.4%, de niñas y niños de 4to de primaria alcanzaron el nivel “Satisfactorio” de aprendizaje en Lectura, respectivamente. Foto: LR
En Loreto y Ucayali están los indicadores más preocupantes. Solo el 9% y 16.4%, de niñas y niños de 4to de primaria alcanzaron el nivel “Satisfactorio” de aprendizaje en Lectura, respectivamente. Foto: LR

A pesar de los avances en cobertura escolar, el acceso a la educación en Perú sigue siendo desigual. Mientras la mayoría de niños y adolescentes están matriculados en inicial (85.4%), primaria (96%) y secundaria (88.7%), el 58% de menores con discapacidad y de origen indígena o afrodescendiente no está matriculado en ninguna institución educativa.

Así lo alertó el Comité de los Derechos del Niño sobre la preocupante exclusión educativa que enfrentan miles de menores en el país, según sus observaciones finales a los informes periódicos sexto y séptimo combinados del Perú.

Falta de docentes bilingües

La falta de docentes que hablen lenguas indígenas sigue siendo una de las grandes barreras para una educación verdaderamente inclusiva. Al respecto, el representante de Unicef, Javier Álvarez, destacó que, aunque Perú ha logrado avances en la asistencia escolar, este es solo el primer paso hacia un sistema educativo que garantice aprendizajes de calidad.

En ese sentido, expresó su confianza en que más niños y niñas se sumen a las aulas este año y que, a través de los Servicios de Apoyo Educativo, se implementen herramientas prácticas que permitan a los docentes adoptar métodos de enseñanza más inclusivos y efectivos.

“Si mantenemos un solo modelo de enseñanza, sólo aquellos estudiantes que se adapten a dicho modelo lograrán aprender. Es necesario que en una misma aula convivan tantos modelos de enseñanza como estilos o formas de aprendizaje existan entre las y los estudiantes, así también evitamos que los chicos dejen la escuela y se conviertan en presa fácil de quienes se aprovechan de sus necesidades materiales y afectivas para involucrarlos en delitos”, enfatizó.

A pocos días del inicio del año escolar, Álvarez instó a la comunidad educativa a reforzar su compromiso con una educación inclusiva. Según destacó, garantizar espacios de aprendizaje equitativos es clave para que todos los niños, niñas y adolescentes accedan a una formación de calidad y alcancen su máximo potencial.

“Hoy sabemos que cada persona tiene su propio ritmo para adquirir conocimientos y demostrar sus habilidades. Hay quienes aprenden escuchando, escribiendo, dibujando o mirando. En ese sentido, la educación inclusiva incorpora modelos de enseñanza que se adaptan a las necesidades personales de cada estudiante, permitiendo que todas las niñas y niños aprendan”, comentó.