El llamado de la tribu autoritaria, por Diego Pomareda


La libertad está de luto. No solo porque ha partido el máximo exponente del liberalismo en el Perú, cuya obra y trayectoria nos recordaron lo perjudicial de la autocracia, sino también porque, según el último reporte del V-Dem Institute, el mundo —y el Perú en particular— ha respondido más a la llamada de la tribu autoritaria que a los principios emancipadores del nobel.

De acuerdo con el informe, por primera vez en más de dos décadas, el número de autocracias (91) supera al de las democracias (88); las democracias liberales están en extinción, habiendo pasado a ser el régimen menos común en el mundo (24); y el 72% de la población mundial vive bajo regímenes autocráticos. Hoy, el mundo es menos libre, los derechos civiles retroceden y la separación de poderes se ha convertido en una quimera.

En este contexto, el Perú contribuye al promedio negativo de América Latina, siendo uno de los países con mayor intensidad en el proceso de autocratización. El reporteseñala que en nuestro país “se observa una de las caídas más abruptas en los niveles democráticos de los últimos años”, citando el autogolpe de Castillo, la represión del gobierno y el autoritarismo parlamentario que afecta la independencia judicial.

Por otro lado, junto a Hungría y a India, el Perú se encuentra dentro de aquellos con “niveles tóxicos de polarización”. Además, estamos en el puesto 6, tomando en cuenta la magnitud del retroceso en relación a aquellos países que en los últimos años presentaron ciertos estándares de democracia (misma lista que Nicaragua, India y México). 

Sin embargo, no todo son malas noticias. Según el reporte, en la última década, países como Ecuador, Brasil y Polonia han logrado sobreponerse a los llamados autocráticos a partir de una fuerte oposición, de conseguir el poder democráticamente y alterando la tendencia regresiva. Otro ejemplo es el de Canadá, donde las fuerzas democráticas liberales cobran fuerzas con miras a las elecciones del 28 de abril. 

Como señala el último informe del V-Dem Institute, el Perú se juega el futuro de sus libertades en las próximas elecciones. Así nos encontramos, como indicaba nuestro nobel, ante la incomprensible disyuntiva de elegir entre ser del primer mundo o del tercero. Está en nuestras manos vivir en libertad o dejarnos seducir nuevamente por la llamada de la tribu autoritaria.