Germán Leguía aseguró que Agustín Lozano debió renunciar a la FPF tras investigaciones: "La solución es que los clubes grandes asuman el control"
El exmundialista en Argentina 1978 y España 1982 cree que aun existen posibilidades para la selección en las Eliminatorias al Mundial del 2026. Además, cuestionó la presencia de Agustín Lozano en la FPF y sugirió que los clubes grandes tomen el control del fútbol peruano.

La selección peruana atraviesa un difícil momento en sus aspiraciones de clasificar al Mundial 2026. Tras caer ante Venezuela de visita en la última fecha, ahora a la Bicolor le quedan solo 4 partidos para revertir la situación: actualmente se ubica en la penúltima posición. En una entrevista con La República, el exfutbolista Germán Leguía abordó este panorama del equipo de todos y propuso una partipación más activa de los equipos más grandes del fútbol peruano para comenzar a tener más protagonismo en Sudamérica. El exmundialista critició la gestión de Agustín Lozano, presidente de la FPF, y también habló sobre Jorge Fossati, Juan Reynoso y la llegada de Óscar Ibáñez.
—¿Cuál es tu análisis de la selección nacional que está virtualmente eliminada?
—Yo pienso que lo de Ricardo Gareca fue importante para la selección nacional porque cambió la mentalidad de los jugadores. Con su ausencia el problema se agudizó porque no hubo respuesta en este grupo y tampoco hay futbolistas para el recambio. Además, no veo en el futuro que la situación sea distinta porque no van a salir menores ya que la FPF no prioriza este trabajo. En su momento Gareca habló de esta problemática y hoy la estamos sufriendo.
—¿Cuál sería la solución?
—En mi época hubo torneos interbarrios e interescolares que permitieron la aparición de cracks como Teófilo Cubillas, Ramón Mifflin, Roberto Chale o Juan José Muñante. Creo que se debe apostar hacia los colegios. En otros países, se construyen campos de fútbol en los terrenos abandonados para que los chicos jueguen. Acá inauguran losas o canchas sintéticas que no ayudan en nada.
—En 2021 la FPF y el entonces presidente Pedro Castillo anunciaron el retorno de la liga interescolar. Sin embargo, no se avanzó nada.
—Siendo Castillo presidente cualquier cosa podía pasar. Creo que el IPD podría tomar la iniciativa y organizar una liga interescolar. Los recursos y el apoyo del gobierno son necesarios para aportar en favor del fútbol y del deporte en general.
—¿Los torneos de menores de la FPF sirven de algo?
—Los chicos que llegan a las selecciones menores provienen de torneos sin convocatoria y sin relevancia, donde solo asisten los familiares. Si se organizaran campeonatos con gran convocatoria entre colegios, los chicos jugarían con público e irían puliendo su temple. Por eso que en los sudamericanos juveniles los muchachos se ven absorbidos por la presión ante rivales que si la saben manejar porque muchos ya juegan en Primera.
—¿Crees en la clasificación al Mundial?
—Dije hace tiempo que era bien difícil que podamos lograr un cupo. Ahora bien, puede pasar cualquier cosa si pierden Venezuela y Bolivia, nosotros nos aplicamos y arañando podemos pelear por el séptimo lugar. Lo que me molesta es que recién al final los jugadores se ponen las pilas. No podemos estar siempre raspando, no podemos estar en ese plan. Menos mal que Chile está mal, sino ya estaríamos muertos. A Rusia 2018 clasificamos de esa manera, casi de milagro, y años después seguimos en lo mismo pensando que Dios es peruano y en los milagros en lugar de trabajar.
—Tocará sacar la calculadora…
—Qué nos queda a estas alturas, solo el sufrimiento y la calculadora. Ahora estamos pensando ganarle a Colombia en Barranquilla, como fue en las eliminatorias pasadas y a Ecuador en casa. Uff, si se dan esos resultados nos pondríamos séptimos en la tabla e Ibáñez pasaría a ser el segundo Ricardo Gareca.
—¿Te imaginabas ver a Perú penúltimo en unas eliminatorias que otorgan seis cupos y medio?
—Desde un inicio dije que la selección no es un laboratorio para hacer pruebas. Cuando se fue Gareca se debió traer a un entrenador que se asemeje a su estilo. Por otro lado, a nivel de clubes estamos mal, hace años que ningún equipo peruano supera la fase de grupos en la Copa Libertadores. Además, el aumento a seis del cupo de extranjeros y la cantidad de jugadores nacionalizados impide que salgan nuevos futbolistas.
—¿Qué crees que pasó con Juan Reynoso?
—Juan quiso implementar una forma diferente tratando de hacer rotaciones, como lo hizo en los clubes donde trabajó, pero para eso necesitas un universo de jugadores amplio y no lo hay. El “Cabezón” murió en su ley.
—¿Y Jorge Fossati?
—Un señor, un caballero, aunque para levantar a un equipo así tenía que venir un entrenador con llegada al jugador como es ahora Ibáñez quien ha vuelto a confiar, por ejemplo, en Carrillo que está jugando bien. Al futbolista peruano le gusta que lo apapachen.
—¿Te parece bien que a Ibáñez lo hayan nombrado como entrenador interino solo para los seis partidos que restan?
—Claro, porque si venía un entrenador de afuera hubiera costado mucho dinero sabiendo que es muy complicado clasificar. En cambio, Ibáñez te garantiza conocimiento del medio, llegada al jugador y conexión con la gente. Los resultados estuvieron a la vista: a Bolivia se le ganó bien y a Venezuela no se le pudo sacar un empate por culpa del árbitro.
—En la derrota ante Venezuela quedó demostrado que no tenemos peso dirigencial, como lo dijo Paolo Guerrero…
—Hace muchos años nos vemos perjudicados con arbitrajes parcializados. Recuerda aquella vez cuando nos dirigía Sergio Markarián y el árbitro argentino Patricio Loustau nos perjudicó en un partido contra Uruguay. Nos hizo trizas y perdimos la opción de ir al Mundial de Brasil 2014. El peso dirigencial aparece cuando tu equipo va a los mundiales, no porque tu dirigente vaya a pasear a los eventos de la Conmebol o la FIFA. Todo tiene categoría y el currículum de Perú es bajo.
—¿Te sorprendió la salida de Juan Carlos Oblitas de la FPF?
—Cuando se fue Gareca pensé que también se iría Juan Carlos. La relación con Agustín Lozano no era buena y creo que no debió esperar que lo echen. Lozano comenzó a buscar culpables por la mala campaña de la selección y tras el encarcelamiento decidió sacar al “Ciego”. Se genera un gran problema cuando te dejas utilizar.
—¿Qué te parece la gestión de Agustín Lozano en la FPF?
—Muchos pierden el tiempo pensando en eso y te digo lo que pienso: es más de lo mismo. Aquí el problema es la falta política deportiva y el no apostar por los menores o los torneos interescolares. En cuanto a Lozano me parece normal su labor. ¿Quiénes eligen a los presidentes en la FPF? Son los dirigentes de las departamentales, lo cual es increíble. Antes los clubes grandes como la “U”, Alianza y Cristal tenían peso y unidos tomaban decisiones. Hoy es el fútbol amateur el que decide todo. Una locura.
—¿Lozano debería postularse a la reelección?
—Insisto, los clubes deben unirse para tratar de modificar los actuales estatutos, reestructurar el fútbol peruano y desterrar el poder de las departamentales. Si esto no cambia, nada impide que Lozano continúe en la Videna.
—Julio César Uribe deslizó la posibilidad de postular a las elecciones de la FPF ¿Qué te parece?
—No lo van a dejar candidatear. La mejor opción era Juan Carlos Oblitas, lo malo es que alteraron los estatutos para acomodarse entre los de las departamentales. Felicito a Julio César por tener la intención de tomar un fierro caliente para hacer cambios, pero eso no va a pasar.
—¿Debió renunciar Lozano tras su detención?
—Claro, debió renunciar. Sin embargo, ¿qué ganábamos con su salida? El segundo es del mismo grupo y el tercero igual. El poder queda entre ellos. Mira, se fue Oviedo y quedó Lozano que es del mismo bando. La solución es que los clubes grandes del fútbol profesional asuman el control de la FPF.
—Hablemos de tu amado Universitario. ¿Qué opinas de la llegada de Raúl Ruidíaz al Atlético Grau?
—Rarísimo que Ruidíaz se haya ido a Grau, no sé si pagará su sueldo que es bien alto. No es por minimizar a Grau. Ellos no tienen gran hinchada y su estadio es pequeño.
—¿Jean Ferrari debió hacer el esfuerzo para ficharlo?
—Si tienes compromisos económicos, no puedes hacer locuras y salirte del presupuesto. Raúl es un jugador bien costoso para el medio local y para la realidad de Universitario.
—Cuando eras gerente deportivo en la gestión de Raúl Leguía, Ruidíaz se fue al Morelia de México…
—Le hicimos un contrato con un buen sueldo porque no podíamos pagarle la carta pase. Luego se fue sin dejar un real al club y allí tuvimos un problema.
—¿Cómo vislumbras el futuro?
—Está todo muy jodido. Los clubes profesionales tienen que unirse y reestructurar el fútbol, no queda otra. Sino, vendrán años de más fracasos y frustraciones.