Ciencia

Descubren la estructura más grande del universo de 1.300 millones años luz de ancho y lleva un nombre en honor a los incas

Científicos del Max Planck Institute hallaron Quipu, la mayor superestructura cósmica jamás registrada, con 200 cuatrillones de masas solares y más de 1.3 mil millones de años luz de extensión.

La superestructura posee filamentos de gas y estrellas entrelazados con cúmulos de galaxias de 1.3 millones de años luz de ancho. Foto referencial: IA
La superestructura posee filamentos de gas y estrellas entrelazados con cúmulos de galaxias de 1.3 millones de años luz de ancho. Foto referencial: IA

Un equipo de astrónomos han identificado el objeto más grande del universo jamás registrada. La superestructura nombrada, Quipu, en honor al antiguo sistema de medición inca, se extiende por más de 1.300 millones de años luz y alberga una masa estimada de 200 cuatrillones de soles.

El descubrimiento, realizado por un equipo de astrónomos liderado por Hans Bohringer del Max Planck Institute, se basó en datos del CLASSIX Cluster Survey. Este colosal hallazgo podría influir en la forma en que se miden parámetros clave como la constante de Hubble y la radiación cósmica de fondo (CMB).

 Imagen de cinco superestructuras recién descubiertas. Quipu (rojo) es la estructura más grande que se ha encontrado en el Universo. Las otras son Shapley (azul), Serpens-Corona Borealis (verde), Hercules (violeta) y Sculptor-Pegasus (beige). Foto: H. Bohringer

Imagen de cinco superestructuras recién descubiertas. Quipu (rojo) es la estructura más grande que se ha encontrado en el Universo. Las otras son Shapley (azul), Serpens-Corona Borealis (verde), Hercules (violeta) y Sculptor-Pegasus (beige). Foto: H. Bohringer

La estructura más grande jamás encontrada en el universo

Las superestructuras cósmicas están formadas por filamentos cósmicos, enormes agrupaciones de cúmulos de galaxias y supercúmulos unidos por la gravedad y la materia oscura. Hasta ahora, las mayores estructuras conocidas eran de varios cientos de megaparsecs, pero Quipu ha superado todas las expectativas con sus más de 400 megaparsecs de longitud.

 Diagrama de la superestructura de Quipu. La distancia está en unidades de megaparsecs, con puntos rojos que muestran los miembros de la superestructura y líneas negras que muestran los enlaces. Foto: H. Bohringer

Diagrama de la superestructura de Quipu. La distancia está en unidades de megaparsecs, con puntos rojos que muestran los miembros de la superestructura y líneas negras que muestran los enlaces. Foto: H. Bohringer

Este titánico filamento cósmico alberga el 45% de los cúmulos de galaxias conocidos y contiene una fracción significativa de la materia del universo observable. Su enorme masa y tamaño influyen en la evolución de las galaxias, modificando sus velocidades y la forma en que interactúan con el entorno.

¿Por qué usaron el nombre “Quipu”?

El equipo de investigadores bautizó esta superestructura con el nombre de Quipu, inspirado en el antiguo sistema de registro de los incas. Los quipus eran herramientas hechas con cuerdas y nudos que servían para almacenar información matemática y administrativa en el Imperio Inca.

 La imagen de cielo completo de las fluctuaciones de temperatura (mostradas como diferencias de color) en el fondo cósmico de microondas se realizó a partir de nueve años de observaciones de WMAP. Foto: H. Bohringer

La imagen de cielo completo de las fluctuaciones de temperatura (mostradas como diferencias de color) en el fondo cósmico de microondas se realizó a partir de nueve años de observaciones de WMAP. Foto: H. Bohringer

La estructura cósmica descubierta recuerda visualmente a un quipu, con un filamento principal y varias ramificaciones menores que lo conectan. Este patrón sugiere una relación entre la distribución de galaxias y la forma en que los incas organizaban sus registros, lo que llevó a los autores del estudio a elegir este nombre para la gigantesca red cósmica.

¿Qué nos dice Quipu sobre la evolución de las galaxias?

Los investigadores han observado que los cúmulos de galaxias en superestructuras como esta muestran diferencias en su densidad y composición en comparación con aquellos que se encuentran aislados. Los movimientos de las galaxias dentro de Quipu pueden estar acelerados por la gravedad, lo que influye en su desarrollo y en la forma en que interactúan con el medio intergaláctico.

Además, este colosal filamento cósmico podría estar afectando la formación estelar, ya que la enorme influencia gravitacional de la superestructura cósmica podría alterar el suministro de gas interestelar, elemento clave para la creación de nuevas estrellas.

¿Cómo las superestructuras afectan la radiación cósmica de fondo?

Uno de los aspectos más relevantes de este descubrimiento es su impacto en la radiación cósmica de fondo (CMB), la luz remanente del Big Bang que ha sido clave para entender la expansión del universo.

La gravedad de Quipu y otras superestructuras similares generan un fenómeno conocido como efecto Sachs-Wolfe integrado (ISW), que provoca pequeñas variaciones en la CMB cuando la luz atraviesa estas inmensas regiones. Estas fluctuaciones pueden generar distorsiones gravitacionales, lo que complica la precisión de nuestras mediciones sobre la historia del universo observable.

Asimismo, estas superestructuras a gran escala podrían estar afectando las mediciones de la constante de Hubble, el parámetro que determina la velocidad de expansión del universo. Al influir en el movimiento de las galaxias, generan errores en los cálculos de las velocidades relativas, lo que podría explicar algunas de las discrepancias actuales en la cosmología moderna.