Atentado en Trujillo: delincuentes destruyen 10 vehículos y 11 casas tras detonar explosivos por cobro de cupos
La PNP detuvo a tres sospechosos vinculados al ataque y confiscó explosivos,lo que generó mucha preocupación sobre la extorsión en el distrito de El Porvenir, donde se piden más patrullajes.
Trujillo vivió minutos de terror en la madrugada del martes 14 de enero, cuando extorsionadores detonaron explosivos en la empresa de transporte El Cortijo, ubicada en la cuadra 29 de la avenida Jaime Blanco, en el sector Víctor Raúl, distrito de El Porvenir. El violento atentado dejó como saldo daños materiales en 10 vehículos, 11 viviendas afectadas y un adulto mayor herido.
El estruendo de la explosión despertó a los vecinos y generó un pánico en la zona. Según Palermo Carrillo, conductor de la empresa El Cortijo, las detonaciones dañaron microbuses, automóviles particulares y las ventanas de las casas cercanas. “Son cerca de 10 microbuses afectados, además de autos pequeños y viviendas. Nunca habíamos vivido algo así”, comentó.
Vecinos piden mayor seguridad tras atentado
Las personas del sector afectado denunciaron que la explosión retumbó a lo largo de toda una manzana. "Es la primera vez que esta empresa sufre un ataque extorsivo. Pedimos mayor seguridad porque los patrullajes son escasos en esta zona", declaró una vecina. Las 11 viviendas afectadas presentan daños significativos, especialmente en ventanas y puertas.
Un adulto mayor identificado como Carmen Polo Saldaña resultó herido cuando un vidrio le cayó en la cabeza tras la explosión. “El estruendo me despertó. Sentí el impacto y la ventana cayó sobre mí. Me hicieron tres puntos en la cabeza, pero estoy recuperándome”, relató.
Tres detenidos por ataque a empresa de transportes
La Policía Nacional del Perú (PNP) actuó rápidamente y detuvo a tres sujetos implicados en el atentado: Guillermo Loyola Mercedes, de 22 años, Ricardo Veneros Monzón, de 19 años, y Edwin Herrera Sánchez, de 37 años. Durante la intervención, se incautaron nueve cartuchos de dinamita, mechas lentas, fulminantes, un manuscrito extorsivo, celulares y vehículos utilizados en el ataque.
El caso ha encendido las alarmas sobre el incremento de la extorsión en Trujillo, mientras las autoridades y la población exigen medidas inmediatas para garantizar la seguridad en zonas vulnerables como El Porvenir.