Cheques de estímulo por US$1.702 en Alaska: quiénes son los beneficiarios y cuándo se pagaría el nuevo monto en 2025

Los residentes de Alaska tienen la oportunidad de solicitar el Pago del Dividendo Permanente (PFD) y un bono único de alivio energético para 2025, con un monto total de US$1.702, según informó el Departamento de Ingresos de esta parte de Estados Unidos. Este pago anual, que proviene de los ingresos generados por el petróleo del estado, busca distribuir parte de la riqueza obtenida por los recursos naturales de la región entre su población.

El Pago del Dividendo Permanente de Alaska varía cada año de acuerdo con la fórmula utilizada para su cálculo. Inicialmente, la ley determinaba que el pago se basaría en una fórmula de la década de 1980, que consideraba los ingresos del Fondo Permanente de Alaska y el número de beneficiarios. No obstante, desde 2017, la legislatura estatal tiene la facultad de establecer el monto final del pago, tomando en cuenta el presupuesto estatal y otras necesidades de financiamiento.

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¿Quiénes pueden solicitar los cheques de estímulo 2025?

Para acceder a los cheques de estímulo de 2025, los residentes de Alaska deben cumplir con ciertos requisitos establecidos por las autoridades locales. Aquí te presentamos los requisitos para solicitar el PFD 2025:

• Ser residente del estado durante todo el año 2024.
• No haber estado fuera de Alaska por más de 180 días, salvo que se trate de excepciones aprobadas, como servicio militar, educación fuera del estado o tratamiento médico.
• No haber sido condenado por delitos graves en el último año.

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¿Qué impacto dejarán estos cheques de estímulo en la economía de Alaska?

Los cheques de estímulo de US$1.702 llegarán en un momento crucial para la economía de Alaska, que, como muchos otros estados, ha sufrido las consecuencias de una inflación que no muestra signos de desaceleración. El Pago del Dividendo Permanente es una fuente vital de ingresos para numerosas familias en Alaska. Debido al elevado costo de vida en el estado, este pago ayuda a cubrir gastos esenciales como el alquiler o la hipoteca.

La economía de Alaska ha dependido históricamente de industrias como el petróleo y el turismo, las cuales han experimentado fluctuaciones debido a factores globales. Asimismo, el PFD tiene un impacto considerable en la economía local, ya que muchos residentes destinan el dinero recibido a consumir en comercios y servicios dentro del estado, lo que estimula la actividad económica y fomenta la creación de empleo.