Trump regresa a la Casa Blanca y los migrantes tiemblan
Donald Trump asume el cargo este lunes como presidente de Estados Unidos, una vuelta al poder que estremece a los migrantes en situación irregular, amenazados con deportaciones masivas e inminentes.
El republicano ya ha llegado al Capitolio con su sucesor y pronto predecesor Joe Biden, quien lo recibió en la Casa Blanca para una visita de cortesía. "Bienvenido a casa", le dijo.
El 45º (2017-2021) y pronto 47º presidente de Estados Unidos subió los escalones de la entrada principal de la Casa Blanca en una helada mañana invernal pero soleada, tras asistir a un oficio religioso en la iglesia episcopal de San Juan con su esposa Melania, tocada con sombrero oscuro con una banda blanca.
La vicepresidenta Kamala Harris recibió poco antes a su sucesor en el cargo J.D. Vance y su esposa.
Cuando aún no ha tomado posesión del cargo, funcionarios de la administración entrante anunciaron una batería de decretos que Trump piensa proclamar en cuanto se convierta en presidente de la primera potencia mundial.
Como prometió a sus seguidores en un baño de masas el domingo, el magnate multiplicará las medidas para combatir la inmigración ilegal.
Decretará la emergencia nacional en la frontera de Estados Unidos con México, hará que los militares desempeñen un papel clave en la defensa de "las fronteras y la integridad territorial" y declarará terroristas a los carteles y al grupo criminal venezolano Tren de Aragua, informaron los funcionarios. También quiere acabar con el derecho de asilo y de ciudadanía por nacimiento.
Además eliminará los programas federales de diversidad y reconocerá solo dos sexos: "Masculino y femenino", añadieron.
Al mediodía, hora de Washington (17H00 GMT), Trump iniciará su segundo mandato.
El acto no se realizará en las escalinatas exteriores del Capitolio, como marca la tradición, sino en el interior del edificio debido al frío ártico, como hizo Ronald Reagan en 1985.
Con una mano sobre una biblia heredada de su madre jurará "proteger la Constitución" bajo la cúpula del Capitolio, el mismo lugar donde el 6 de enero de 2021 sus partidarios habían intentado impedir que el Congreso certificara la victoria de Biden. El dispositivo de seguridad es excepcional después de dos intentos de asesinato contra él durante la campaña.
A sus 78 años, se convertirá también en el jefe de Estado estadounidense de más edad en ser investido.
Tres de los hombres más ricos del mundo, los magnates tecnológicos Elon Musk, Mark Zuckerberg y Jeff Bezos, asistirán a la investidura. También los expresidentes Bill Clinton, George W. Bush y Barack Obama.
Luego del discurso de investidura, el nuevo presidente acudirá al Capital One Arena de Washington, un pabellón donde sus partidarios empezaron a llegar de madrugada.
"Jesús es mi salvador y Donald Trump es mi presidente. Y sólo ver cómo este hombre ha cambiado, no sólo el país, sino el mundo, es tan revelador", declaró a la AFP una de sus simpatizantes, Rachel Peters, de 28 años.
La jornada concluirá con bailes.
Biden, que pone fin a medio siglo de vida política, ha orquestado una transición civilizada con un hombre que se la negó a él. Furioso por una derrota que nunca reconoció, Trump rechazó asistir a su investidura en 2020.
- Indultos preventivos -
Pero horas antes el demócrata concedió indultos preventivos a congresistas y funcionarios para protegerlos de "procedimientos judiciales injustificados y políticamente motivados". Alegó "circunstancias excepcionales".
Trump promete sacudir el orden global una vez más, con aranceles drásticos, incluso a Canadá y México y amenazas territoriales a Groenlandia y Panamá.
Su victoria ha dado alas a la derecha radical del mundo entero. La jefa del gobierno italiano, Giorgia Meloni, y los presidentes de Argentina, Javier Milei, y de Ecuador, Daniel Noboa, asistirán a la inauguración a pesar de que normalmente no se invita a líderes extranjeros.
También estarán el vicepresidente chino Han Zheng y el líder opositor venezolano Edmundo González Urrutia, a quien Trump considera "presidente electo" del país caribeño.
La primera elección de Trump conmocionó al país y al mundo, pero la segunda suscita resignación. Ni rastro de las manifestaciones multitudinarias de hace ocho años.
La mayoría de los países se esfuerzan por mantener las apariencias frente a este presidente estadounidense que habla abiertamente de anexionar a Canadá.
Para su segundo mandato, Trump cuenta con consejeros elegidos en función de su lealtad y una estrecha mayoría en el Congreso. Además la Corte Suprema está anclada a la derecha.
Pero Donald Trump también comienza el lunes su salida de escena. Debe resignarse a no ser nunca más candidato, salvo un golpe de fuerza contra el límite constitucional de dos mandatos.
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