Sociedad

Más de 250 mil casos de depresión fueron atendidos en Perú en el 2024

La ausencia de estrategias de salud mental en colegios y el trabajo, forman parte de lo que hay que mejorar para reducir la depresión y con ella el suicidio”, manifiesta el médico psiquiatra Carlos Bromley.

Expertos advierten que los trastornos mentales, como estrés postraumático y depresión, son agravados por la pobreza, marginalidad y una gestión emocional deficiente. Foto: composición LR / Jazmín Ceras
Expertos advierten que los trastornos mentales, como estrés postraumático y depresión, son agravados por la pobreza, marginalidad y una gestión emocional deficiente. Foto: composición LR / Jazmín Ceras

La depresión constituye uno de los principales casos de salud mental en Perú, donde el año pasado fueron atendidos 256.663 pacientes según la médico psiquiatra, July Caballero, directora de Salud Mental del Ministerio de Salud,

Este padecimiento sigue causando sufrimiento y muerte en el mundo y es difícil implementar las estrategias necesarias para reducir su incidencia, conociendo que sus causas están relacionadas con factores genéticos y psicosociales, señala por su parte el psiquiatra Carlos Bromley, preocupado en romper los estigmas de la salud mental.

Y es que esta enfermedad, según expertos, sigue desatendida a pesar de su gravedad y crecimiento, aunque este lunes 13 se conmemora el Día Mundial de Lucha Contra la Depresión.

Riesgo de suicidio es mayor

“Se ha estudiado que suele influir y perjudicar el bienestar subjetivo de las personas en todo el mundo, encontrando en los llamados determinantes sociales la respuesta, estos incluyen el inequitativo mercado laboral, la desigualdad en la distribución de la riqueza que genera grupos vulnerables y desprotegidos, en los que el riesgo de suicidio es mayor, la pobreza, la soledad y la falta de sentido de pertenencia, la insuficiencia de servicios de salud mental, sobre todo los de crisis, la dinámica familiar disfuncional, la ausencia de estrategias de salud mental en los colegios y el trabajo, forman parte de lo que hay que mejorar para reducir la depresión y con ella el suicidio que se incrementa día tras día”, manifiesta Bromley.

Las redes sociales cuando son usadas inadecuadamente hacen que la mente deprimida busque compararse y las personas comparen sus propios peores momentos con los mejores momentos de la vida de otra persona, disminuyendo su autoestima y valoración personal.

Los principales factores

El especialista agrega que “el positivismo perverso en el que vivimos, obliga a que las personas sientan que deben disfrutar de sí mismas de manera absoluta, lo que es imposible en una sociedad que no ofrece todas las posibilidades para hacerlo, donde hay pobreza, desigualdad, frustración por doquier, crisis en todas sus formas, miedo a morir por inseguridad ciudadana, carencia de líderes morales que nos conduzcan a un mejor porvenir, entre otros, que genera frustración y con ella depresión y escasas ganas de vivir”.

Bromley sostiene que “entre los factores que predisponen a padecer de depresión se encuentran los genéticos y también los psicosociales y ambientales; por ejemplo, el estrés, la disfunción familiar, un entorno de violencia, la falta de habilidades sociales, el clima, la salubridad, entre otros”, por lo que recomendó “mantener estilos de vida saludables, alimentarse sanamente, realizar actividad física, trabajar y sentirse útiles y productivos, proporcionarse espacios recreativos, descansar adecuadamente y, sobre todo, fortalecer el vínculo con el entorno familiar y social”.

El Minsa insta a la población a mantenerse alerta. Foto: Minsa

El Minsa insta a la población a mantenerse alerta. Foto: Minsa

Depresión es un transtorno

La depresión se puede acompañar de ansiedad, consumo de alcohol u otras drogas, psicosis y vincularse a enfermedades como el cáncer, problemas tiroideos, metabólicos (diabetes), VIH, tuberculosis y Alzheimer, entre otras.

La médico psiquiatra July Caballero explica que la depresión es un trastorno de la salud mental que tiene como características, la presencia por más de 15 días de tristeza, llanto, pensamientos negativos, cansancio fácil, incapacidad para experimentar placer, pérdida de interés o satisfacción en las actividades de la vida, reducción de la energía vital para vivir, sentimientos de inutilidad o culpa, fijación en fracasos del pasado o autorreproches, problemas para pensar, concentrarse, tomar decisiones, alteraciones del sueño y el apetito, entre otros.

La gravedad de la depresión puede ir desde episodios de tristeza leves y temporales hasta cuadros de depresión persistentes y graves donde aparece la conducta suicida y el propio hecho de quitarse la vida.

Tareas por realizar

  • Recopilación de datos de depresión y suicidio, por parte del personal de salud y acciones de seguimiento activo a los afectados directos, familiares y conocidos.
  • Capacitación a los profesionales de comunicaciones de los medios sobre como informar de los suicidios de manera neutral, sin glorificar ni romantizar el lenguaje.
  • Utilización de la nueva generación de antidepresivos con menos efectos secundarios y psicoterapias eficaces como la terapia cognitivo-conductual.
  • Utilización de la tecnología móvil para mejorar conectividad y propiciar uso de líneas de apoyo.
  • Manejo de la soledad y la falta de sentido de pertenencia.
  • Poner énfasis adicional en mejorar e incrementar los servicios de salud mental, sobre todo los de crisis (Centros de Salud Mental Comunitaria y Unidades de Hospitalización en Salud Mental, en los Hospitales Generales).
  • Propiciar una sociedad justa, equitativa y con progreso para todos.