El País sobre Juan Luis Cipriani: "Fue cardenal muy joven, doctor honoris causa, amigo del papa y un depredador sexual"
Luego de publicar la denuncia contra el exarzobispo de Lima, el diario El País, a través de un artículo del periodista Renzo Gómez Vega, publicó un perfil sobre la figura católica acusada de abuso sexual.
Después de que se publicara una denuncia anónima contra el cardenal Juan Luis Cipriani en el diario El País, han vuelto a surgir varias controversias sobre su persona en el contexto católico peruano y su relación con el Opus Dei. En un artículo reciente de este medio español, el periodista Renzo Gómez Vega realizó un perfil del prelado.
"Fue proclamado cardenal por Juan Pablo II con apenas 57 años; ha sido distinguido por el Estado con los reconocimientos más altos que pueden otorgarse: Orden El Sol y Medalla de Honor en el Grado de Gran Cruz; y según algunos medios estuvo cerca de ser el primer papa latinoamericano en el cónclave de 2005. Seis universidades le concedieron el Doctorado honoris causa; condujo un programa radial y televisivo durante dieciocho años; y gozó de un poder influyente en las decisiones políticas del Perú, un país mayoritariamente católico. A pesar de contar con estas condecoraciones, Juan Luis Cipriani siempre dividió aguas por su talante beligerante y ultraconservador. Pero hoy, tras la primicia develada por El País, su memoria se encamina a ser la de uno de esos hombres de iglesia que dañó al prójimo e intentó esconder sus pecados debajo de su sotana", se lee en el primer párrafo del artículo.
Más allá de las denuncias de abuso, el artículo también menciona que Cipriani ha sido duramente criticado por sus declaraciones sobre los derechos de las mujeres y de la comunidad LGTBIQ+. En 2016, causó indignación al insinuar que las víctimas de violación podían ser responsables de lo sucedido, y en 2017 expresó su rechazo al currículo educativo con enfoque de género mediante comentarios despectivos. Su férrea oposición al aborto y a ciertas concepciones de familia lo consolidó como uno de los líderes más conservadores de la Iglesia peruana, con apoyo del fujimorismo y de sectores ultraconservadores.
Asimismo, el artículo recuerda que, a lo largo de su trayectoria, Cipriani enfrentó acusaciones de encubrimiento, plagio y cercanía con las fuerzas militares durante el conflicto interno en Perú. En la década de 1990, fue señalado por su actitud despectiva hacia organismos de derechos humanos. Hoy, a sus 81 años, su legado sigue rodeado de polémica, con voces que exigen esclarecer las denuncias en su contra y otras que piden justicia.
¿Qué dice la denuncia contra Juan Luis Cipriani?
En 2019, Juan Luis Cipriani, exarzobispo de Lima y primer cardenal del Opus Dei, renunció a la Orden y abandonó el Perú tras ser acusado de abuso sexual contra un menor, quien en la actualidad tiene 58 años. Según el diario El País, los hechos se remontan a 1983, y el escándalo marcó un punto de quiebre en su trayectoria eclesiástica. Aunque el Vaticano anunció que el papa aceptaba su renuncia como parte del protocolo que exige a los obispos presentar su dimisión al cumplir 75 años, la rapidez con la que se aprobó levantó sospechas, revelándose luego la verdadera causa de su salida.
Tras estas denuncias, Cipriani quedó inhabilitado para usar los hábitos y símbolos de su cargo, así como para participar en cónclaves futuros. Esta última restricción perdió relevancia, ya que en diciembre de 2024 cumplió 81 años, superando la edad máxima permitida para votar en dichos eventos. No se llevó a cabo un proceso canónico en su contra, ya que las medidas fueron aceptadas voluntariamente por el exprelado, quien desde entonces ha mantenido un perfil discreto.
A pesar de su retiro eclesiástico, Cipriani regresó al Perú el pasado 7 de enero y recibió de manos del alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, la medalla de la Orden al Mérito en el grado de Gran Cruz. El acto fue difundido en las redes de la municipalidad, donde se destacó que el exsacerdote, miembro del Opus Dei, al igual que el alcalde, no portaba sotana ni ningún símbolo cardenalicio. Este reconocimiento generó controversia, considerando el peso de las acusaciones que motivaron su retiro hace varios años.