Olenka Mejía sorprende al confesar que tenía las llaves del departamento de Jefferson Farfán: "Era vernos casi siempre"
Olenka Mejía reveló detalles inéditos sobre su relación con Jefferson Farfán. En una reciente entrevista, confesó que tenía acceso al departamento del exfutbolista en Miraflores y que solían verse con frecuencia. "Si esa llave hablara...", confesó.
En una nueva edición del programa digital 'Café con la Chevez', la modelo Olenka Mejía sorprendió al compartir detalles desconocidos de su vínculo con el exseleccionado peruano Jefferson Farfán. Durante la conversación, confesó que tenía acceso a la vivienda del exjugador en Miraflores y que su relación se basaba en encuentros frecuentes. "Cuando yo quería, dormía ahí", reveló.
La influencer, originaria de Villa El Salvador, explicó que, a pesar de haber crecido en el mismo distrito que la ‘Foquita’, nunca coincidieron en su juventud debido a la diferencia de edad. Sin embargo, con el tiempo establecieron una cercanía que los llevó a compartir diversos momentos juntos.
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Olenka Mejía recuerda su romance con Jefferson Farfán
Durante la entrevista, Olenka Mejía fue consultada sobre su relación con Jefferson Farfán y la naturaleza del vínculo que mantuvieron. La modelo confesó que nunca discutieron si su romance era exclusivo o abierto, pero aseguró que no tenía motivos para dudar de la lealtad del exfutbolista. "Nunca lo aclaramos, nunca hubo esa conversación sobre exclusividad, pero tampoco pensaría que él estuvo con otra. Prácticamente, era vernos casi siempre", declaró.
Además, mencionó que su dinámica con el exdelantero de Alianza Lima y la selección peruana era espontánea y basada en la confianza. En esa línea, uno de los aspectos más llamativos de sus declaraciones fue su afirmación de que tenía acceso al departamento de Jefferson Farfán en Miraflores. “Sí, tenía la tarjeta. Si esa tarjeta hablara, todo lo que diría…”, comentó entre risas. Según relató, solía quedarse a dormir en el lugar cuando lo consideraba oportuno, y el exfutbolista le avisaba cuando iba camino al inmueble.
"Él tenía una reunión, me avisaba: ‘Estoy yendo para allá’, y listo. Nunca hubo algo de maldad, que yo lo tramé o algo que yo creé sola. No fue así", enfatizó Olenka Mejía.