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Joel ruega ser monaguillo en 'Al fondo hay sitio' y deja en shock al padre Manuel: "Vine a entregarme"

Después de superar su asombro, el sacerdote le da una rotunda respuesta al hijo de 'Charo' en la temporada 11 de 'Al fondo hay sitio' y le hace una gran revelación. ¿Qué dijo?

Joel quiere cambiar su vida para bien en 'Al fondo hay sitio' tras haber humillado a 'Patty' en el altar. Foto: composición LR/América TV
Joel quiere cambiar su vida para bien en 'Al fondo hay sitio' tras haber humillado a 'Patty' en el altar. Foto: composición LR/América TV

El haber rechazado a 'Patty' en el altar parece ser el punto de inflexión en la vida de Joel Gonzales en 'Al fondo hay sitio'. Después de abandonar a su exprometida en plena iglesia y de intentar en vano regresar con ella, el hijo de 'Charito' asegura que ha decidido cambiar para bien. Con ese objetivo en mente, se acerca al padre Manuel en busca de ayuda y le revela su deseo de entregarse a la religión para convertirse en monaguillo.

Al principio, el sacerdote se muestra completamente perplejo, pero después termina negando el pedido del 'Cara de Pez' debido a una razón igual de sorprendente.

Joel quiere ser monaguillo y le pide ayuda al padre Manuel

El capítulo 381 de 'Al fondo hay sitio', temporada 11, trajo grandes momentos como el protagonizado por Tito, quien conoce por primera vez a su hija. Otra escena destacada comenzó cuando Joel se encuentra con el padre Manuel para contarle su suplicio.

"Yo me he estado sintiendo mal, recontra mal. Usted me conoce, sabe que mi vida es un infierno. Yo siento que ya he pisado fondo. Por eso lo estoy buscando. Necesito de su apoyo. Yo quiero que usted me ayude a encontrar esa paz que tanto necesito", le dice. El sacerdote, sereno, le responde que solo Dios puede darle esa tranquilidad.

 ‘Patty’ le dejó en claro a Joel que no lo piensa perdonar en ‘Al fondo hay sitio’. Foto: composición LR/América TV

‘Patty’ le dejó en claro a Joel que no lo piensa perdonar en ‘Al fondo hay sitio’. Foto: composición LR/América TV

Ante ello, el ex de Patty le revela su nuevo propósito de vida: prestar sus servicios al Señor porque considera que es la única forma de ser alguien correcto que dejará de jugar con las mujeres.

"Por eso mismo, padre. Tú cambeas con él, lo manyas. Tú conoces todos los sacramentos, los mandamientos (…). Yo necesito que tú me ayudes. Yo me vine a entregar, padre. A la firme, me quiero entregar. Quiero ser monaguillo. Siento que solo así voy a encontrar esa paz que necesito, voy a ser un hombre de bien, voy a dejar de romper el corazón a tantas mujeres", argumentó.

El padre Manuel niega ayuda a Joel revela que abandonó la religión

Sin embargo, después de mostrar asombro, Manuel Armesto se niega a tenderle la mano al hijo de 'Charo' y expone la poderosa razón detrás de ese rechazo: en realidad, ha colgado los hábitos.

Confundido, Joel le responde que puede descolgar la ropa de sacerdote y volvérsela a poner porque esta se seca rápido debido al insoportable calor. Ante ello, el personaje interpretado por el actor de origen ruso Fernando Bakovic exclama, mientras se pone una camisa playera y lentes de sol: "¡He renunciado a la vida religiosa!".

¿Por qué Manuel renunció al sacerdocio en 'Al fondo hay sitio'?

Manuel Armesto decidió colgar los hábitos tras haber aparecido recurrentemente desde el primer capítulo de la exitosa serie de América TV.

Sobre su resolución, cuando Joel reaccionó diciendo que no podía renunciar a su trabajo "así por así", el expárroco argumentó alterado: "Créeme que no fue sin motivo, lo hice porque tú me empujaste a eso. Todos mis colegas, amigos, la opinión pública… ¡en todas las redes me dicen el 'cura salado'! Soy el único sacerdote que no ha podido realizar una boda sin ningún contratiempo. Ya me cansé, así que vas a tener que buscar a otra persona para que te ayude porque yo me voy a dedicar a la vida mundana.

Posteriormente, Manuel se montó en una bicicleta y gritó: "¡Chau, horrible niño con cara de pez!". El hijo de 'Charo', a la distancia, solo atinó a contemplar cómo se alejaba, mientras decía para sí mismo: "Qué elegante, padre".