Chavismo celebra investidura de Maduro en Venezuela en medio de rechazo internacional
Una caravana motorizada "antifascista" recorrió el sábado parte de Caracas para celebrar la juramentación como presidente de Venezuela de Nicolás Maduro, que la oposición tachó de "golpe de Estado" y ha generado un creciente rechazo internacional.
Maduro, de 62 años, juró el viernes para un tercer periodo consecutivo de seis años (2025-2031) en el Parlamento controlado por el chavismo.
La caravana chavista recorría el sábado el centro de Caracas, donde están los principales poderes del Estado, incluida la Presidencia, y que desde la semana pasada está tomado por cientos de policías y militares.
"Estamos contigo Maduro, contigo hasta la muerte", declaró un ciudadano identificado como Víctor Izarra a la cadena estatal Venezolana de Televisión, que transmitía este sábado imágenes de partidarios del chavismo rodando en motocicletas.
Según el mandatario izquierdista, La Fuerza Armada, "columna vertebral" para la estabilidad de su gobierno, también le reafirmó su apoyo.
"Este nuevo mandato es una oportunidad para fortalecer la paz", escribió Maduro en Telegram siguiendo una muletilla de los últimos días.
En la otra orilla, el opositor exiliado Edmundo González Urrutia reclama el poder: asegura que arrasó en las elecciones del 28 de julio y que la proclamación de Maduro es fraudulenta.
"Consuma un golpe de Estado (y) se autocorona dictador", expresó González, que descartó un ya improbable viaje a Caracas desde Santo Domingo para presionar reconocimiento y el poder.
Estados Unidos tachó de "farsa" el nuevo mandato de Maduro y la Unión Europea dijo que "carece de legitimidad". Brasil expresó el sábado "su gran preocupación" por la situación en el país y llamó, junto con Francia, a "reanudar el diálogo con la oposición".
Ecuador, Panamá, Costa Rica y República Dominicana, que conforman la Alianza para el Desarrollo en Democracia (ADD), rechazaron por su parte "de la manera más enérgica el acto ilegítimo de toma de posesión" al considerarlo "producto de un fraude electoral impuesto a través del terror de Estado contra el pueblo venezolano".
- "Sacarlo del cargo es improbable" -
Las calles de Caracas han estado desoladas estos días, entre la incertidumbre y expectativa del futuro del país. Unas 50 personas fueron detenidas por "razones políticas" en los días previos a la investidura, según la ONG Foro Penal.
A la investidura del hijo político de Hugo Chávez, en el poder desde 2013, asistieron unos pocos jefes de Estado, entre ellos los presidentes de Cuba, Miguel Díaz Canel, y de Nicaragua, Daniel Ortega, así como delegados de China y Rusia. Todos acompañaron también el acto en el que los militares juraron lealtad y subordinación al presidente.
"El chavismo no ha mostrado grandes signos de debilidad" y "tampoco hay señales creíbles de que los militares estén interesados o dispuestos a volverse contra el gobierno", explicó a la AFP Rebecca Hanson, profesora de la Universidad de Florida.
"Esto no quiere decir que Maduro durará seis años más, pero a menos que algunos de estos factores cambien, sacarlo del cargo es improbable", añadió.
La jefa de la oposición, María Corina Machado, insistió el viernes, no obstante, que González Urrutia irá a Venezuela para "juramentar como presidente constitucional (...) en el momento correcto, cuando las condiciones sean las adecuadas".
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