Sporade: la bebida peruana que, al igual que la Inca Kola, destronó a una multinacional y la obligó a bajar de precio
Esta bebida isotónica peruana consiguió destronar al gigante Gatorade, que durante 40 años logró dominar el mercado sudamericano y patrocinar a las principales selecciones de fútbol.
En el competitivo mercado de bebidas hidratantes en Perú, una marca nacional logró lo que parecía imposible: destronar a una reconocida multinacional. Sporade, introducida en 2004 por Aje Group, logró posicionarse rápidamente como una opción accesible y calidad frente a Gatorade, el gigante global que había liderado el sector durante cincuenta años.
Gracias a una estrategia comercial basada en precios competitivos y una sólida distribución en todo el país, esta bebida peruana transformó el panorama del mercado. Su impacto fue tan significativo que obligó a su principal competidor a reducir sus precios para no perder relevancia entre los consumidores locales.
Sporade: ¿cómo logro destronar a Gatorade?
La bebida energizante de la multinacional Pepsico fue lanzada al mercado en 1965 y desde entonces fue todo un éxito en el mundo deportivo. Su presencia trascendió fronteras al convertirse en la imagen y patrocinador oficial de algunos de los clubes de fútbol más importantes del mundo, como el FC Barcelona, Manchester City, Arsenal y Juventus. Sin embargo, detrás de su éxito global se encontraba una importante desventaja: Pepsico debía pagar una millonaria suma a la Universidad de Florida por los derechos de uso de la fórmula original de la bebida, lo que elevaba significativamente su costo y, por ende, su precio en el mercado.
Sporade patrocina a muchos deportistas peruanos. Foto: Facebook
En Perú, adquirir esta bebida era considerado un lujo al alcance de pocos, una debilidad que fue hábilmente explotada por Grupo AJE. La compañía desarrolló una estrategia enfocada en el liderazgo en costos e implementó avances tecnológicos que optimizaron sus procesos productivos.
Además, según un informe de Mercado Negro, Sporade evitó los altos costos de distribución directa al optar por un modelo basado en terceros que recogían los productos directamente de sus plantas. Este enfoque permitió a Grupo AJE generar importantes ahorros, que, en la práctica, le permitió ofrecer al público, un precio justo y accesible.
A tan solo 5 años de su ingreso, la bebida peruana ya contaba con 30% de participación en el mercado de nuestro país y en la actualidad se estima que supera el 60%. La compañía repitió esta fórmula en gran parte de Latinoamérica y hoy lidera en países como Venezuela, Colombia, Bolivia y México.