Este país de América Latina halló el "petróleo del futuro" y podrá usarlo por milenios en planta de 1.000 millones de dólares
Según indican expertos internacionales, el crecimiento energético en esta nación latinoamericana es "sostenido".
México avanza hacia una transición energética sostenible, adoptando energías renovables y priorizando tecnologías verdes. En este contexto, el hidrógeno verde, denominado "el petróleo del futuro", se posiciona como una alternativa estratégica para reducir emisiones y diversificar fuentes de energía. En línea con este compromiso, Sinaloa albergará una mega planta pionera, un proyecto encabezado por la empresa Tango Solar.
Este proyecto tiene como objetivo no solo posicionarse como líder en la producción de hidrógeno verde en América Latina, sino también impulsar la creación de empleos relacionados con energías limpias y promover inversiones en infraestructura sostenible. La instalación será fundamental en las iniciativas tanto nacionales como globales para enfrentar el cambio climático y fortalecer un modelo energético basado en la sostenibilidad.
Una millonaria inversión para un futuro de hidrógeno verde en México
Como parte de las iniciativas de México en el ámbito del hidrógeno, que incluyen colaboraciones con Japón, se desarrollará un proyecto destinado a la construcción de un parque fotovoltaico de gran envergadura y la infraestructura necesaria para la producción de hidrógeno verde. Este ambicioso plan contará con una inversión de 1.172 millones de dólares.
La iniciativa de Tango Solar constituye un destacado avance en la transición hacia la energía sostenible. Foto: EL CEO.
Mediante un proceso de electrólisis impulsado por energía solar, se espera que el sistema produzca aproximadamente 41.485 toneladas de hidrógeno verde anualmente. Este logro será posible gracias a un parque fotovoltaico, que estará compuesto por paneles solares capaces de generar 921 MW en corriente directa y 787 MW en corriente alterna, extendiéndose a lo largo de 1.500 hectáreas.
Sinaloa fue elegido como sede por su ubicación estratégica en el norte de México, lo que facilitará el suministro de hidrógeno verde al mercado nacional y permitirá exportaciones a países como Estados Unidos, España, Portugal, Francia y Uruguay. Este enfoque busca consolidar a la región como un referente en el desarrollo y liderazgo de energías limpias.
¿Cómo se construirá este mega proyecto proyecto hacia la transición energética?
El proyecto contempla el desarrollo de una línea de conexión de 10,88 km que enlazará la subestación de maniobras de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) con la subestación reductora de la planta, además de un hidroducto de 18,04 km diseñado para transportar el hidrógeno verde hasta la estación de compresión El Oro, ubicada en Guaymas, Sonora. En su etapa inicial, generará aproximadamente 400 empleos directos, impulsando significativamente la economía local de Sinaloa y fomentando el desarrollo de capacidades en el sector energético.
El vector energético del hidrógeno limpio tiene el potencial de apoyar la lucha contra el calentamiento global y la descarbonización de la industria. Foto: H2LAC.
A largo plazo, la operación de esta planta no solo fortalecerá la infraestructura energética de México, sino que también permitirá diversificar su matriz energética y promover un modelo de sostenibilidad. Estas mejoras posicionarán al país como un actor clave en el mercado mundial de energías limpias, consolidando su liderazgo en la transición hacia un futuro más verde y competitivo a nivel global.
El hidrógeno verde, una fuente rara de producir
El hidrógeno verde, reconocido como la opción más limpia para este combustible, se produce utilizando energía renovable, como la solar o la eólica, para extraer hidrógeno del agua. Aunque es considerado un combustible del futuro por liberar agua en lugar de dióxido de carbono al quemarse, el hidrógeno no se encuentra en su forma pura en la Tierra, lo que hace necesario fabricarlo. Su impacto ambiental, sin embargo, depende directamente del proceso empleado en su producción.
La producción de hidrógeno verde enfrenta desafíos importantes. Uno de ellos es el alto costo de los electrolizadores, las máquinas que separan el hidrógeno del agua. Además, las fuentes de energía renovable, como la solar y la eólica, no están disponibles todo el tiempo, lo que limita el uso continuo de estos equipos.
Pese a estos desafíos, el hidrógeno verde es clave para descarbonizar sectores como transporte, industria y generación de energía, contribuyendo al reemplazo de combustibles fósiles, promoviendo la descentralización energética y fortaleciendo el desarrollo económico y social.