Joe Biden busca proteger las defensas cibernéticas de Estados Unidos y firma una orden ejecutiva
El presidente Joe Biden firmó una orden ejecutiva que refuerza las defensas cibernéticas de EE. UU., estableciendo estándares de ciberseguridad para contratistas gubernamentales.
En un esfuerzo por consolidar la seguridad nacional frente a crecientes amenazas digitales, el presidente Joe Biden ha promulgado una orden ejecutiva destinada a robustecer las defensas cibernéticas de Estados Unidos. Esta medida establece estándares mínimos de ciberseguridad para los contratistas gubernamentales y simplifica la imposición de sanciones a entidades extranjeras implicadas en actividades cibernéticas maliciosas.
La orden ejecutiva, firmada el jueves, busca también preparar a las agencias federales para enfrentar desafíos emergentes, como los que presentan las computadoras cuánticas, cuya capacidad para descifrar códigos podría comprometer la seguridad nacional. Esta iniciativa se suma a esfuerzos previos de la administración Biden para reforzar la ciberseguridad, incluyendo programas que promueven la seguridad en dispositivos inteligentes.
PUEDES VER: Buenas noticias para inmigrantes en EE. UU.: Joe Biden extiende el TPS para venezolanos y salvadoreños
Establecimiento de ciberseguridad para contratistas gubernamentales
La nueva orden ejecutiva exige el desarrollo de estándares mínimos de ciberseguridad que deberán cumplir todos los contratistas tecnológicos del gobierno federal. Estos estándares incluyen la obligación de presentar evidencia de cumplimiento, garantizando que las empresas que colaboran con el gobierno mantengan prácticas de seguridad robustas. Esta medida busca proteger las infraestructuras críticas y la información sensible manejada por estas entidades.
Además, se pretende que estas regulaciones fomenten una cultura de ciberseguridad más sólida entre los proveedores del gobierno, asegurando que estén mejor preparados para enfrentar y mitigar posibles ciberamenazas. La implementación de estos estándares es un paso significativo hacia la protección de los sistemas gubernamentales contra ataques cibernéticos cada vez más sofisticados.
¿Qué implica los ciberataques de otros países?
La orden ejecutiva también simplifica el proceso para imponer sanciones a gobiernos y actores extranjeros responsables de ciberataques contra Estados Unidos. En particular, se enfoca en naciones como China, Irán, Rusia y Corea del Norte, que han sido vinculadas a actividades cibernéticas maliciosas dirigidas a infraestructuras críticas estadounidenses.
Esta medida permite la aplicación de sanciones a individuos y entidades que lleven a cabo ataques de ransomware contra hospitales u otras organizaciones esenciales, reforzando la postura de Estados Unidos contra quienes amenazan su seguridad cibernética. Al facilitar la imposición de sanciones, se busca disuadir futuras agresiones y responsabilizar a los perpetradores de estas acciones.
Preparación ante amenazas de tecnologías emergentes
Reconociendo el potencial disruptivo de tecnologías emergentes, la orden ejecutiva instruye a las agencias federales a fortalecer sus defensas cibernéticas contra amenazas asociadas con la computación cuántica. Las computadoras cuánticas, con su capacidad para procesar información a velocidades sin precedentes, podrían descifrar sistemas de encriptación actuales, poniendo en riesgo la seguridad de datos sensibles.
La administración Biden busca anticiparse a estos desafíos, asegurando que las infraestructuras críticas estén preparadas para resistir posibles ataques facilitados por avances en la computación cuántica. Esta proactividad es esencial para mantener la integridad y confidencialidad de la información gubernamental en un panorama tecnológico en constante evolución.
Reacciones y perspectivas futuras
La firma de esta orden ejecutiva ha sido bien recibida por diversos sectores, considerándola un paso necesario para fortalecer la ciberseguridad nacional. Anne Neuberger, asesora adjunta de seguridad nacional, destacó que la orden demuestra el compromiso de Estados Unidos con la protección de sus ciudadanos y empresas frente a amenazas cibernéticas.
Aunque la administración actual está próxima a concluir, se espera que estas medidas obtengan apoyo bipartidista, dado su enfoque en la seguridad nacional y la protección de infraestructuras críticas. La continuidad y expansión de estas políticas serán fundamentales para enfrentar eficazmente las crecientes amenazas en el ámbito cibernético.