Agencias

Marco Rubio irá a Panamá y otros cuatro países de América Latina en su primer viaje


Marco Rubio irá a cinco países de América Latina, incluido Panamá, en su primer viaje al extranjero como jefe de la diplomacia de Estados Unidos, para abordar "la agenda" del presidente Donald Trump, centrada en "recuperar" el Canal de Panamá y restringir la migración.

Además de Panamá, Rubio visitará Costa Rica, El Salvador, Guatemala y República Dominicana, afirmó la portavoz del Departamento de Estado Tammy Bruce. No dio una fecha exacta pero se espera que sea a finales de la próxima semana.

Rubio será el primer jefe de la diplomacia en estrenar el cargo con un viaje a América Latina en más de dos décadas.

"Hay una razón por la que este es el primer viaje" y es que "indica lo en serio que se lo toma", opinó la portavoz.

"Es increíblemente significativo" y demuestra "la importancia que tendrá América Latina en la nueva administración", comentó a la AFP Jason Marczak, director del Centro de América Latina del centro de reflexión Atlantic Council, en Washington.

Bruce no especificó si Rubio tratará la polémica en torno a la soberanía del Canal de Panamá, pero dijo que tiene la intención de "abordar los temas que le importan y, sin duda, los temas de la agenda de Trump".

Y entre los objetivos del magnate republicano figura "recuperar" el control del Canal de Panamá, para lo cual no descarta el uso de la fuerza militar.

"China está operando el canal de Panamá (...) y lo vamos a recuperar", sostuvo.

En una audiencia ante el Senado para confirmarlo en el cargo, Rubio no sugirió la fuerza militar, pero expresó su preocupación por la influencia de China cerca de la vía intraoceánica de 80 km construida por Estados Unidos y administrada por Panamá desde hace 25 años.

- Contrarrestar a China -

El presidente panameño José Raúl Mulino insiste por su parte en que el canal "es y seguirá siendo" de Panamá. "No fue una concesión ni una dádiva" de Estados Unidos, recalca.

Para Marczak los comentarios de Trump forman parte de "una táctica de negociación más amplia para llegar finalmente a una solución" buena para Estados Unidos y que impida abrir "más la puerta a China en América Central", muy importante a nivel geográfico y estratégico.

"'Recuperar' también puede significar recuperar nuestra importante participación en el canal; si eso significa una mayor inversión, tanto directa como en servicios indirectos que apoyan al canal, creo que Panamá lo acogería con agrado", opina.

Rubio, que se estrenó esta semana en el cargo, promete una "política exterior pragmática" que en el caso de América Latina se centrará en "frenar la migración masiva" y "garantizar la seguridad de las fronteras".

- "Vital" -

"El compromiso con nuestros vecinos es un elemento vital para abordar la migración, las cadenas de suministro y el crecimiento económico, que son claves para la política exterior", declaró Bruce a la AFP.

Y El Salvador, Guatemala y Honduras han sido algunas de las principales fuentes de migración hacia Estados Unidos, junto con Venezuela y Haití.

Después de su investidura, Trump puso fin a un programa de su predecesor Joe Biden destinado a ofrecer vías legales para la solicitud de asilo y, en su lugar, ha amenazado con bloquear el acceso a los migrantes sin visa y deportar a los que se hallen en situación irregular en Estados Unidos, empezando por aquellos con antecedentes penales.

Pero se desconoce a cuántos migrantes estarán dispuestos a aceptar los países y en qué condiciones.

En cuanto a El Salvador, el equipo de Trump sintoniza con el presidente Nayib Bukele, quien ha reprimido el crimen de manera implacable y letal. El hijo del republicano, Donald Trump Jr., asistió a su segunda investidura el año pasado.

Trump, que invocará la Ley de enemigos extranjeros de 1798 para "eliminar la presencia de todas las pandillas", como la venezolana Tren de Aragua, tenía previsto hablar este jueves con Bukele, según su agenda divulgada por la Casa Blanca.

La decisión de visitar Guatemala marca un continuismo con la administración de Biden, que convirtió al presidente guatemalteco Bernardo Arévalo en un gran aliado regional.

Arévalo tiene algo en común con Rubio, un halcón muy crítico con China.

Y es que Guatemala reconoce a Taiwán, la isla democrática y autogobernada que China reclama como parte de su territorio para apoderarse de ella algún día, por la fuerza si es necesario.

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