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¿Por qué los videojuegos pueden ser adictivos? Lo que dicen los expertos

La liberación de dopamina es solo una de las características que permiten clasificar a los videojuegos como potencialmente adictivos y a esta adicción como un trastorno mental.

¿Mal humor? ¿Frustración y reacciones violentas? Conoce aquí más sobre la adicción a los videojuegos.
Foto: Grunge/YouTube

Los videojuegos siguen siendo la industria del entretenimiento más millonaria del mundo, y continúan dominando sobre el cine y la música desde hace 10 años. Sin embargo, no todo es color rosa con ellos, ya que más allá del aporte artístico, cultural o simplemente tecnológico que conllevan, también cargan un lado oscuro: son adictivos. Pero ¿cómo un juego interactivo que vemos por una pantalla —o por gafas de realidad virtual— puede convertirse en algo más parecido a una droga que a un simple juguete?

Para empezar, los videojuegos pueden ser adictivos por una variedad de razones. Muchos estudios se han llevado a cabo desde hace décadas, pero dada la complejidad con la que han ido creciendo —en uso y popularidad— podemos señalar también que se han estudiado más en años recientes.

¿Por qué los videojuegos son adictivos?

Algunas de las razones por las que los videojuegos pueden ser adictivos incluyen:

  • Liberación de dopamina: los videojuegos activan la liberación de dopamina, un neurotransmisor que se asocia con sentimientos de placer y recompensa. Esto puede crear un ciclo de buscar y jugar el título para experimentar esa sensación placentera una y otra vez.
  • Escapismo: para algunas personas, jugar videojuegos proporciona un escape temporal de los problemas y factores estresantes de la vida real, lo que puede hacer que sea difícil dejar de jugar.
  • Competencia: los videojuegos multijugador a menudo implican competir contra otros jugadores, lo que puede crear una sensación de desafío y un impulso para mejorar las habilidades de uno. Esto puede hacer que el juego se sienta gratificante y agradable, incluso cuando se juega durante largos períodos de tiempo.
  • Conexiones sociales: algunos videojuegos, especialmente los que se juegan en línea, brindan oportunidades para que los jugadores se conecten y socialicen con otros. Esto puede crear un sentido de comunidad y pertenencia al que puede ser difícil renunciar.
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¿Qué estudios se han llevado a cabo sobre la adicción a los videojuegos?

Los puntos anteriores son los más mencionados a través de estudios que se han llevado a cabo desde hace más de una década. Estos son algunos de los más importantes en materia de su aporte al estudio de este desorden:

  • "Trastorno de los juegos de Internet: una revisión sistemática de la investigación epidemiológica de la última década" (Kuss & Griffiths, 2012).
  • "El lado oscuro de los juegos: la asociación entre los juegos patológicos y los problemas psicológicos y sociales" (Király, 2017).
  • "La naturaleza y el proceso de la adicción a los videojuegos: un estudio cualitativo" (King & Delfabbro, 2011).
  • "Prevalencia del trastorno de los juegos de Internet: una revisión sistemática de estudios basados en la población" (Rehbein, 2016).

¿La adicción a los videojuegos ya es una enfermedad?

En 2019, la OMS aprobó el trastorno por videojuegos como un desorden mental. La lista actualizada fue aprobada en asamblea en mayo de 2021 y entró en vigencia en febrero de 2022. Vale indicar que esto permite que la adicción de videojuegos sea tratada como una enfermedad y que se generen tratamientos.

El tema sigue siendo polémico, pero los estudios siguen realizándose con especial énfasis, debido a que la industria de videojuegos sigue creciendo, especialmente en las generaciones más jóvenes. En 2020, una encuesta hecha por la American Psychological Association reveló que no había consenso sobre la adicción de los videojuegos en la comunidad científica de aquella institución.

¿Por qué la OMS ya considera a los videojuegos como adictivos?

La adicción a los videojuegos ha sido reconocida como un trastorno por la comunidad médica porque se ha demostrado que tiene efectos negativos en la salud mental y física de las personas, así como en sus relaciones y funcionamiento diario. La investigación ha demostrado que el uso excesivo de videojuegos puede conducir a complicaciones como las siguientes:

  • Disminución de la motivación y la productividad.
  • Deterioro del funcionamiento cognitivo y emocional.
  • Disminución de la salud física y aumento del riesgo de obesidad.
  • Aislamiento social y disminución de las habilidades sociales
  • Deterioro de las relaciones con amigos y familiares.

Estos efectos negativos son similares a los observados con otros tipos de comportamientos adictivos, como el abuso de sustancias o el juego. Como resultado, la comunidad médica ha llegado a reconocer el uso excesivo de videojuegos como un trastorno, y ahora está incluido en la última edición del Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-5) con el nombre de "Trastorno de los juegos en Internet".

¿Cómo combatir la adicción a los videojuegos, incluyendo:

  1. Establecer límites de tiempo: Establecer un tiempo diario o semanal limitado para jugar videojuegos y cumplirlo rigurosamente.
  2. Encuentra otras actividades: Dedicar tiempo a otras actividades que sean satisfactorias, como deportes, hobbies o relaciones sociales.
  3. Evita los desencadenantes: Identificar los desencadenantes que impulsan el juego excesivo, como el aburrimiento, y encontrar alternativas más saludables.
  4. Busca ayuda profesional: Si la adicción a los videojuegos está afectando significativamente la vida diaria, buscar ayuda de un terapeuta o un grupo de apoyo especializado puede ser útil.
  5. Juega con moderación: Reconocer los límites y jugar videojuegos con moderación y conscientemente, evitando la tendencia a jugar por largos períodos de tiempo sin descanso.