Conferencia Episcopal sobre caso Sodalicio: "Es competencia exclusiva de la Santa Sede juzgar, decidir y resolver"
Según las investigaciones, en el Sodalicio se cometieron abusos físicos y sexuales, así como múltiples irregularidades e ilícitos.
La Conferencia Episcopal Peruana emitió un comunicado en el que se refirió a su actuación en el caso de los abusos cometidos por los fundadores del Sodalicio — en el que se involucra a Luis Figari — e indicó que no está dentro de sus facultades el juzgar, decidir y resolver sobre las graves denuncias que involucran a dicha institución. Según las investigaciones, se habrían cometido abusos físicos, sexuales y de conciencia por parte de los miembros de la Iglesia Católica.
"Siendo el Sodalitium Christianae Vitae (Sodalicio) una sociedad de vida apostólica laical de Derecho Pontificio, es competencia exclusiva de la Santa Sede actuar como instancia jurisdiccional para juzgar, decidir y resolver sobre los graves asuntos que se denunciaron e involucraron a esta institución", comunicó.
En esa misma línea, la Conferencia Episcopal informó que "por su naturaleza, no tiene tal competencia, puesto que no es instancia jurisdiccional para tratar las denuncias presentadas contra los miembros del Sodalitium Christianae Vitae".
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Por otro lado, en la nota de prensa emitida expresaron que, con el fin de proteger a las víctimas y salvaguardar la vida y la misión de Iglesia, colaboraron con la justicia en los casos de los abusos cometidos por los fundadores del Sodalicio.
Comunicado de la Conferencia Episcopal Peruana.
Papa Francisco expulsa a Jaime Manuel Baertl y Juan Carlos Len Álvarez del sodalicio
En octubre pasado, la Nunciatura Apostólica en Perú comunicó la expulsión de dos integrantes del Sodalicio por parte del Papa Francisco: Jaime Manuel Baertl Gómez, quien se desempeñó como exasistente de espiritualidad, y Juan Carlos Len Álvarez, exasistente de temporalidades. Como parte de esta decisión se tomó en cuenta la gravedad de los abusos sexuales perpetrados por uno de los involucrados, así como en la responsabilidad de ambos en diversas irregularidades y actos ilícitos.
En consecuencia, el máximo representante de la Iglesia Católica, el Papa Francisco, en conjunto con los obispos del Perú y representantes de los lugares donde opera el Sodalicio de Vida Cristiana, expresó su rechazo por lo acontecido y solicitó disculpas al "pueblo de Dios y a la sociedad civil en su totalidad".
Algunas recientes gestiones económicas e inversiones promovidad por el Rev. Baertl y el Sr. Len al interior del Sodalicio de Vida Cristiana, oportunamente detectados por la "Misión Especial" con ayuda de los organismo económicos de la Santa Sede, constituyen acciones pecaminosas que traicionan el Evangelio. Además, son ilícitos canónicos intolerables que, más alla del escándalo suscitado a nivel internacional, desfiguran la misión evangelizadora de la Iglesia y merman severamente su credibilidad", lamentó.
