El país de Sudamérica que autorizó un proyecto de planta potabilizadora para eliminar la crisis hídrica
Uruguay afronta esta situación con el Proyecto Arazatí, que implementará una planta potabilizadora en San José, utilizando el Río de la Plata como fuente. El objetivo es asegurar el suministro de agua en un país de Sudamérica.
El agua potable es un recurso fundamental en Sudamérica y el mundo; sin embargo, hay naciones que atravesaron diversas crisis hídricas que afectaron a su población. En particular, un país sudamericano, de los más ricos en la región en términos de PBI, reportó que 1,7 millones de personas fueron afectadas, entre abril y agosto de 2023, debido al deterioro del agua corriente, la cual se volvió salada e imbebible.
La nación sudamericana carece de una fuente alternativa para abastecer de agua potable a la mitad de su población, la cual está conformada en su totalidad por 3,444,263 habitantes, según el censo nacional. Esta crisis hídrica se da a pesar de que el país está rodeado por ríos, arroyos y cañadas, que son fuentes importantes de agua dulce.
El proyecto que eliminará la crisis hídrica en un país de Sudamérica
Uruguay aprobó el Proyecto Arazatí para implementar una planta potabilizadora en San José, cuya fuente será el Río de la Plata, con el propósito de garantizar el suministro de agua en el área metropolitana de Montevideo ante posibles períodos de sequía. El proyecto busca ser una solución estructural tras la crisis hídrica de 2023, cuando la población tuvo que consumir agua salada debido a la escasez.
Según informó el ministro de Ambiente, Robert Bouvier, este proyecto se desarrollará en conjunto con el Consorcio Aguas de Montevideo, integrado por cinco empresas de Uruguay y Brasil. Este plan se caracteriza por la inclusión ciudadana a través de reuniones con instituciones y comunidades locales, permitiendo ajustes al proyecto según consideraciones ambientales y solicitudes de información complementaria.
Este proyecto también incluye inversiones significativas en infraestructura de agua y saneamiento, beneficiando a 61 localidades. Según Bouvier, estas son las inversiones más importantes realizadas en Uruguay en décadas en este sector. Además, el enfoque transparente del proceso incluyó la publicación de informes y la recepción de más de 500 comentarios ciudadanos.
Proyecto no generará impactos ambientales en Uruguay
El Ministerio de Ambiente otorgó la Autorización Ambiental Previa (AAP) para el Proyecto Arazatí, tras un proceso exhaustivo liderado por su Área de Evaluación de Impacto Ambiental. Según Bouvier, esta evaluación se caracterizó por ser transparente y participativa, integrando reuniones anticipadas con comunidades locales, denominadas "fuerzas vivas", antes de la audiencia pública reglamentaria.
“Este proyecto no generará impactos ambientales inadmisibles”, dijo Bouvier en una conferencia de prensa. “Para el ministerio este ha sido un proceso clave, sobre todo por la transparencia, la solvencia técnica y el compromiso que asegura un desarrollo que respeta el entorno y garantiza la sostenibilidad de nuestros recursos para el futuro”, agregó.
Sin embargo, el proyecto enfrenta un nuevo desafío con la transición de gobierno en Uruguay. El presidente electo, Yamandú Orsi, expresó dudas sobre la construcción de la planta potabilizadora de Arazatí, promoviendo en su lugar la construcción de una represa en Casupá, en el departamento de Florida. Esta divergencia refleja la posibilidad de un replanteo estratégico en la política hídrica del país.