Estados Unidos

Donald Trump promete cambiar sí o sí el nombre del Golfo de México por el de Golfo de América: "Dentro de poco"

El nuevo presidente de Estados Unidos dio controversiales declaraciones en su primer discurso como mandatario; entre ellas, se refirió al cambio de nombre del Golfo de México.

Donald Trump inicia su etapa como nuevo presidente de los Estados Unidos. Foto: AFP
Donald Trump inicia su etapa como nuevo presidente de los Estados Unidos. Foto: AFP

El exmandatario estadounidense Donald Trump ha vuelto a captar la atención internacional con una propuesta que promete encender el debate. Durante un mitin en Texas el pasado viernes, Trump anunció que, en su regreso a la Casa Blanca, impulsará el cambio del nombre del Golfo de México a "Golfo de América". Esta declaración se alinea con su conocida estrategia de reforzar un discurso centrado en el nacionalismo estadounidense.

¿Cómo tomaron esta nueva propuesta de Trump?

Las reacciones ante esta propuesta han sido variadas. El senador texano Ted Cruz respaldó la iniciativa de Trump, asegurando que “es hora de reconocer la importancia estratégica del golfo para nuestro país”. Por otro lado, representantes del gobierno mexicano, como el canciller Alicia Bárcena, calificaron la propuesta de “arbitraria y provocadora”. “El Golfo de México no solo es una cuestión de nombre, sino de historia y cultura compartida”, afirmó Bárcena.

En redes sociales, los usuarios también mostraron posturas divididas. Mientras algunos estadounidenses celebraron la idea como un acto de patriotismo, otros la consideraron un movimiento innecesario y potencialmente conflictivo.

¿Qué puede suceder si Trump cambia el nombre del Golfo de México?

Cambiar el nombre del Golfo de México no solo tiene implicaciones simbólicas. Según expertos, una decisión de este tipo podría afectar tratados internacionales como el Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (T-MEC), que regula aspectos comerciales y ambientales en la región. Además, el golfo es una fuente crucial de energía, con una producción anual de aproximadamente 1.8 millones de barriles de petróleo al día, según la Administración de Información Energética de Estados Unidos (EIA).

Diplomáticos también han advertido que esta propuesta podría tensar aún más las relaciones entre México y Estados Unidos, que ya enfrentan desafíos por temas como migración y seguridad fronteriza. En este sentido, el analista Jorge Castañeda mencionó que “la iniciativa podría ser vista como un gesto unilateral que ignora la naturaleza binacional del golfo”.

 Donald Trump asumió la Presidencia número 47 de los Estados Unidos. Foto: The White House

Donald Trump asumió la Presidencia número 47 de los Estados Unidos. Foto: The White House

¿Qué dijo Claudia Sheinbaum sobre la declaración de Trump?

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, respondió sarcásticamente a la propuesta de cambiar el nombre de Estados Unidos a "América Mexicana", diciendo: "Suena bonito". Por otro lado, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, rechazó la idea, afirmando que el nombre permanecerá sin cambios.

El Golfo de México, una de las áreas más estratégicas de América, es rica en recursos petroleros y es crucial para las economías de Estados Unidos y México. A pesar de las controversias, esta región seguirá siendo esencial para ambos países.

 Claudia Sheinbaum presentó el "Plan México", con el que pretende volver al país en potencia mundial. Foto: Daniel Augusto

Claudia Sheinbaum presentó el "Plan México", con el que pretende volver al país en potencia mundial. Foto: Daniel Augusto

¿Qué implica la posible modificación del nombre del Golfo de México?

El Golfo de México es una cuenca oceánica que limita con las costas de México, Estados Unidos y Cuba, y posee una superficie de aproximadamente 1.623 millones de kilómetros cuadrados. Es una región de gran importancia económica y estratégica para los países ribereños, debido a sus recursos naturales y rutas comerciales.

Cambiar el nombre de una entidad geográfica de tal relevancia no es un proceso sencillo. Requiere la aprobación de organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas y la Organización Hidrográfica Internacional, que reconocen oficialmente las denominaciones geográficas. Además, este tipo de propuestas pueden generar tensiones diplomáticas entre las naciones involucradas.